El mayor proyecto de demolición de presas en la historia de Estados Unidos, y probablemente del mundo, se completó a finales del año pasado con la eliminación de cuatro enormes infraestructuras de este tipo. De este modo, el río Klamath, entre Oregón y California (EEUU) puede ahora al fin fluir libremente, después de muchas décadas sin poder hacerlo. Los efectos ecológicos de esta recuperación son patentes.
El río Klamath sigue un sinuoso recorrido de aproximadamente 414 kilómetros entre Oregón y la costa norte de California, donde desemboca en el océano Pacífico. Antiguamente, albergaba una abundante población de peces, como el salmón chinook, el salmón coho y la trucha arcoíris, unos recursos básicos para la alimentación de las tribus yurok y karuk, así como de muchos otros grupos tribales indígenas que viven a lo largo del río y dependen del salmón como base de su dieta.
Sin embargo, entre 1903 y 1962, la empresa eléctrica PacifiCorp construyó una serie de presas hidroeléctricas a lo largo del río. El objetivo era generar suficiente electricidad para abastecer a las viviendas cercanas, pero estas infraestructurass tuvieron consecuencias imprevistas, tanto para las comunidades indígenas como para los peces que habitaban el río, según se explica en el documental de la BBC Our Changing Planet.
Estas cuatro presas afectaron significativamente la salud del río y de los peces, impidiendo que las especies de salmón y trucha llegaran a sus zonas de desove, pues estas construcciones actuaban como gigantescos muros que impiden el desplazamiento de estos peces.
Desaparición del salmón por culpa de las presas
En 1997, el salmón coho ya era tan escaso que fue incluido en la Ley Federal de Especies en Peligro de Extinción. Peor aún fue la pérdida de poblaciones sufrida por el salmón Chinook. “Admito que subestimé por completo el alcance de los efectos de las presas en todo el ecosistema y el medio ambiente en general, hasta el Pacífico. Incluso una población de orcas se vio afectada por la pérdida de todos los nutrientes de los peces, impactando así en todas las especies, incluidos los leones marinos y las focas que se alimentan de ellas”, declaró la presentadora del documental, Liz Bonnin, al portal IFLScience.
Antes y después de la eliminación de una de las presas / Agencias
En 2002, se produjo una catastrófica mortandad del salmón cuando las altas temperaturas y el bajo caudal de agua provocaron un brote bacteriano. Se estima que murieron 34.000 ejemplares, y algunos elevan la cifra hasta los 70.000. Esto provocó intensas campañas de protesta de las tribus locales contra estas presas.
“Todo cambió con las presas”, declaró Brook Thompson, miembro de las tribus Yurok y Karuk, a la BBC. “Hasta entonces, siempre habíamos tenido comida de sobra. A los siete años, los salmones eran casi tan grandes como yo, y vi miles de sus cuerpos amontonados en la orilla; olía su carne podrida. Fue apocalíptico”.
Para el Klamath, que en su día fue el tercer río más importante en producción de salmón de la Costa Oeste, esto supuso un golpe durísimo. La población de salmón chinook de otoño se redujo en un 90% y la de primavera en un 98%.
Sin embargo, tras largas décadas de campañas de protesta, en 2022 finalmente se dio luz verde para comenzar la demolición de las cuatro presas inferiores. Los trabajos comenzaron el 5 de octubre de 2024 y actualmente estas cuatro presas son ya historia; no existen.
La eliminación de las presas es solo el primer paso, pues ahora se desarrollan trabajos para restaurar el hábitat a su estado anterior, lo que implica proyectos de revegetación, con siembra manual y con helicópteros.
La eliminación de las presas es solo el primer paso, pues ahora se desarrollan trabajos para restaurar el hábitat a su estado anterior
“Fue un proyecto enorme, y fue increíble ver a los equipos del proyecto de renovación de Klamath trabajar con las comunidades indígenas, unidos con pasión, comprensión y la voluntad de restaurar el río y el ecosistema en general. Compartían su experiencia de una manera alegre, mágica e inspiradora”, dijo Bonnin.
Vuelven los salmones
El 15 de octubre de 2024, pocos días después de finalizar el proyecto de eliminación de la presa, los investigadores avistaron múltiples salmones Chinook regresando a la cuenca del río. Incluso fueron observados en los afluentes del Klamath, en California, una zona que había quedado bloqueada por la presa Iron Gate desde 1961.
“El regreso de nuestros parientes a los c’iyaal es conmovedor para nuestra tribu. Esto es por lo que nuestros miembros trabajaron y creyeron durante tantas décadas”, declaró Roberta Frost, Secretaria de la Tribu Klamath. “Quiero honrar esa labor y agradecerles su persistencia ante lo que parecía un obstáculo insalvable. Los salmones son como nuestra tribu; saben dónde está su hogar y regresaron tan pronto como pudieron”, añadió.