Papas, toreros, subvenciones y permutas republicanas

Vean cómo nivela por abajo una colega del telediario con más audiencia en España: "El papa Francisco tenía dos grandes pasiones en su vida: Dios y también el fútbol". Además de sobrar ese "también", Bergoglio parece que ponía una vela al Altísimo y otra al exoviedista Emilio Lángara. Lo malo es que desarrolla y mete a tope la pata (ojo: actualizo datos): "Era hincha y también socio del equipo de su alma, el club argentino San Lorenzo. Fue el papa más futbolero de los 267 que ha tenido la Iglesia católica a lo largo de su historia". A ver: el fútbol reglado existe desde 1863. Desde entonces, pues, hubo 12 papas, no 267. Sería guapo, pero no consigo figurarme a san Hormisdas o san Silverio (sumos pontífices en el siglo VI) bufanda al viento y animando a voces destempladas al club de su ciudad natal, al Frosinone Calcio (que ni existía, claro). Tampoco, a Adriano VI (siglo VIII) desesperado por otra derrota del Football Club Utrecht (que tampoco se había fundado, claro). No.

Fuente