La ministra de Clima y Medio Ambiente de Polonia, Paulina Hennig-Kloska, abordó este martes en Varsovia con sus colegas europeos el apagón que afectó a España y Portugal el pasado 28 de abril, y confirmó que, según las autoridades españolas, las causas del incidente aún se están investigando, por lo que se mostró reacia a «especular en público» antes de que haya conclusiones. En una conferencia de prensa tras la reunión informal de ministros comunitarios, la ministra polaca afirmó que el tema de la seguridad energética fue central en las discusiones y, en ese contexto, se trató también lo que ocurrió hace dos semanas en la península Ibérica.
Según Hennig-Kloska, un equipo de expertos de varios países europeos, del que forma parte un representante del operador polaco Red Polaca Electroenergética (PSE), está trabajando para «hallar todas las causas» del apagón, y subrayó que antes de que se complete el análisis y se entregue un informe, no tiene objeto «especular» sobre el origen del fallo en el sistema eléctrico.
Los hechos conocidos
La responsable de Energía polaca recordó algunos de los elementos conocidos sobre el incidente, como que «media hora antes [del] apagón estábamos lidiando con muchas y grandes fluctuaciones en la frecuencia» y la potencia del suministro. Posteriormente, aunque «los sistemas se normalizaron», se produjo la caída de varias grandes unidades generadoras, lo que «provocó una sobrecarga que condujo al apagón y a la interrupción del intercambio con el enlace con Francia». Aunque dicha interconexión «inicialmente funcionó», resultó «demasiado pequeña» para manejar la magnitud del problema, explicó la ministra.
Geoestrategia energética
Hennig-Kloska aseguró que el informe que elabore el equipo de expertos se presentará ante la Comisión Europea (CE), se transmitirá a los estados miembros y se hará público, de manera que estará «disponible para su revisión». «Las conclusiones que de él se desprendan deberían ser también una guía para nosotros mismos», señaló la ministra polaca, quien añadió que el objetivo es que el informe ofrezca «indicaciones sobre cómo proteger nuestros sistemas energéticos ante nuevas amenazas renovadas», e incluya «propuestas de soluciones duras a nivel técnico y regulatorio». Hennig-Kloska mencionó también entre los temas que se abordaron en la reunión la compatibilidad técnica de las redes energéticas de Ucrania y Moldavia con las de la UE. La ministra resaltó que una clave a la hora de apoyar a Ucrania es la descentralización de su sistema electroenergético, ya que esto ha demostrado ser más seguro en caso de ataques por parte de Rusia.
Estabilidad de precios
En cuanto a los cambios que la UE prepara en materia energética, Hennig-Kloska mencionó la cláusula de revisión del ETS, el régimen de comercio de derechos de emisión. «Polonia sigue abogando por un escenario de revisión, con miras a garantizar una mayor estabilidad para la economía y para los hogares», afirmó la ministra, que apuntó a la posibilidad de implementar mecanismos como topes a los precios para mitigar las grandes fluctuaciones en el coste de la energía doméstica. Además, la ministra polaca afirmó que su gobierno «luchará constantemente» por el aplazamiento de la fecha de entrada en vigor de la ampliación conocida como ETS2 o por una excepción para el caso de su país, que está inmerso en un «esfuerzo inversor para cambiar las fuentes de calor domésticas y modernizar los sistemas de calefacción en millones de viviendas».