Lo que Ancelotti calificó como una “luna de miel eterna” con el Real Madrid y Florentino Pérez escondía en realidad una relación tóxica que Carletto ha sostenido aguantando los excesos de un presidente cuyos caprichos han malcriado, de nuevo, a un vestuario cargado de egos y celos. Un grupo disfuncional que en este final de temporada, y de ciclo, ha visto cómo se desenmascaraba a jugadores acomodados que se escondían tras las gestas irracionales en la Champions.
La frustración de Mbappé, el fiasco de Vinícius
El epítome de este fiasco es Vinícius, jugador perdido para el fútbol tras verse despojado de la brillantina y el glamour de un Balón de Oro que no ganó ni ganará. Egoísta en ataque, insolidario en defensa e inestable anímicamente, va a ser renovado por el Real Madrid en contra de la voluntad de una grada que hace meses que le dedica más pitos que palmas. En Montjuic ni compareció.
Este clásico del adiós de Ancelotti deja imágenes que retratan cruelmente la deriva de un Real Madrid ruinoso en su final de curso. La imagen de Kylian Mbappé, después de marcar dos goles, simulando una falta en el área del Barcelona resume perfectamente la impotencia del francés durante todo el año. La frustración del delantero, quien pese a marcar 39 goles arrastra las sospechas del vestuario y la grada por su falta de empatía. O la enésima pérdida de balón de un Lucas Vázquez, en el cuarto gol, víctima colateral de la falta de planificación deportiva del club, por la negativa de Florentino a reforzar la plantilla pese a las lesiones de Carvajal, Militao o Alaba. Los errores groseros del gallego se amontonan en la temporada de su adiós al club. No lo merecía.
Ver a Valverde perseguir rivales cojeando ha sido una constante en un año en el que no ha podido descansar porque Ancelotti no tenía futbolistas disponibles. Los paseos de Carletto por la zona técnica con la mirada baja y las manos en los bolsillos, consciente de que estaba dirigiendo su último partido como técnico del Real Madrid antes de embarcar para Brasil. O los olés de la grada azulgrana en la primera parte, tras remontar el 0-2 inicial, sumando la cuarta victoria en cuatro clásicos este curso con 16 goles culés.
14 derrotas y 77 goles en contra
El Real Madrid que pisó Montjuic es fiel reflejo del equipo que ha deambulado por España y Europa cosechando 14 derrotas y 77 goles en contra. Los aficionados blancos han terminado por normalizar la imagen de Courtois resignado y de este Madrid que respiraba aliviado al descanso con un 4-2 en el marcador. En la ducha se quedaron Ceballos y Arda. Al primero, que nunca ha mostrado consistencia para ser titular, el Madrid le queda grande. Al segundo, utilizado como arma arrojadiza contra el entrenador, le sobraron los 45 de Montjuic.
La excelencia en esta segunda etapa de Ancelotti en el banquillo del Real Madrid finaliza de la peor forma posible. La despedida del técnico concluye en pesadilla y su “luna de miel” termina salpicando a Florentino y señalando al vestuario. Adiós a Carletto, adiós a la Liga. ¡Turno para Xabi Alonso!