Luis Enrique Martínez volverá a una final de Champions League 10 años después. Lo hará como técnico del París Saint-Germain y contra el Inter, después de que los ‘nerazzurri’ dejaran en el camino al FC Barcelona de su corazón. «Para mí jugar una final de Champions contra el Barça hubiese sido lo peor. Lo peor. Si nosotros no hubiéramos estado me hubiera encantado que hubiera estado el Barça y que la hubiera ganado. Si íbamos a estar nosotros, y ahora vamos a estar, intentaremos conseguirla», aseguró el asturiano en los micrófonos de Movistar+.
«El resultado fue un poco extraño»
Sobre la eliminación de los de Hansi Flick, Lucho comentó que «si a alguien le dices que vas a hacer seis goles en una semifinal y vas a quedar eliminado no te lo crees. Demostró con su estilo que tipo de futbol se practica en Barcelona. Claramente podrían haber estado en la final y lo merecían. El resultado fue un poco extraño», apuntó.
«Sé que el PSG no despierta muchas simpatías en Barcelona pero así es la vida, yo hago mi trabajo. Este es un proyecto apasionante. Es el proyecto como entrenador. Crear un equipo y aunque se vayan los jugadores seguir pensando que con jugadores jóvenes podemos hacer nosotros esos cracks», siguió el ex entrenador culé.
«Sé que el PSG no despierta muchas simpatías en Barcelona pero así es la vida»
Su PSG se impuso por 2-1 al Arsenal, haciendo (todavía más) bueno el 0-1 de la ida en Londres. «Mikel Arteta casi me asesina, ha llevado el partido a dónde quería. Han conseguido que jugáramos un partido que no queríamos, pero este equipo tiene mucha raza. Merecemos claramente estar en la final», señaló Luis Enrique, elogioso con el trabajo de su homónimo en el banquillo ‘gunner’ y con Gianluigi Donnarumma, autor de tres paradas de mucho nivel. “¿Cómo vas a ganar una Champions si no tienes un gran portero y 11 jugadores de campo a full? ‘Gigio’ ha estado de manera maravillosa, como toda la Champions», destacó.
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Además, el que fuera seleccionador nacional quiso recordar que el camino del PSG hacia la final de Múnich «ha sido tortuoso. Fuimos el equipo con el peor calendario, eso nos ha hecho crecer y mejorar. Al principio de la Champions no conseguimos puntos y creo que el equipo ha seguido creyendo en sí mismo y superando estas cosas», ensalzó Lucho, muy claro a la hora de identificar el punto de inflexión de los suyos. «Contra el City perdíamos 2-0 en un partido que no merecíamos perder. Íbamos mal pero las estadísticas mostraban que éramos de los mejores equipos de Europa. El equipo ha seguido confiando. Vamos a ir a la final, que va a ser claramente un partido muy difícil», acabó.
