Catorce meses de prisión y una orden de alejamiento de 300 metros de las víctimas. Esa es la sentencia que ha impuesto el Juzgado de Instrucción 2 de Cartagena tras un juicio rápido a la agresora de una médico del Servicio de Urgencias del Hospital Santa Lucía de Cartagena.
Los hechos se remontan al pasado 3 de abril, cuando la condenada, visiblemente alterada, arremetió contra una facultativa propinándole un puñetazo en la cara y rompiéndole las gafas que llevaba puestas. La agresión se produjo incluso antes de ser atendida y aunque intentó seguir pegándole, fue la intermediación de otro compañero lo que logró frenar la agresión. Como consecuencia, la facultativa sufrió lesiones en la cara y el otro compañero MIR en el brazo, una situación que llegó a interrumpir momentáneamente la asistencia sanitaria por la agresividad mostrada por la paciente en la puerta de Urgencias de este centro sanitario.
Poco de un mes después del incidente y tras un juicio rápido, el tribunal considera probada la comisión de un delito de atentado contra la autoridad y ha impuesto una pena de 14 meses de prisión (sustituible por trabajos en beneficio de la comunidad), así como una indemnización económica durante 40 días a cada uno de los afectados, además del pago de las costas.
Sobre la agresora también pesará una orden de alejamiento de 300 metros de las víctimas durante cuatro meses.
Desde el Colegio de Médicos de la Región de Murcia afirman que «esta resolución marca un precedente en la defensa de los profesionales de la salud, ya que subraya que el personal sanitario goza de la consideración de autoridad pública cuando actúa en el desempeño de su labor, tal y como establece el Código Penal».
El fallo ha sido recibido con satisfacción, tanto por el Colegio de Médicos como por del Sindicato Médico CESM, entidades profesionales que han valorado positivamente el pronunciamiento judicial como «un paso necesario para disuadir futuras agresiones y proteger el entorno laboral en los centros sanitarios».
El Observatorio reitera la necesidad de reforzar los protocolos de seguridad y de concienciar a la ciudadanía sobre la importancia de respetar la labor del personal sanitario, que trabaja diariamente para garantizar la salud y el bienestar de toda la población.
Denuncia de las agresiones
El Colegio de Médicos de la Región de Murcia y el Sindicato Médico de la Región de Murcia integran el Observatorio Contra la Violencia a Sanitarios de la Región de Murcia, con el objetivo de aunar fuerzas contra las agresiones en el ámbito sanitario.
Entre sus fines destaca el acabar con las agresiones físicas y verbales, así como con los ataques a través de las redes sociales y todas aquellas plataformas en las que se genere inseguridad o miedo al médico; el análisis de las agresiones a profesionales sanitarios, especialmente a médicos, notificados a través de los servicios constituidos a tal efecto en el Servicio Murciano de Salud y el Colegio de Médicos de la Región de Murcia; denunciar públicamente las agresiones de las que se tenga conocimiento; publicar las sentencias condenatorias y llevar a cabo acciones para dar visibilidad al impacto negativo de la violencia en la relación médico-paciente; y vigilar el cumplimiento de los acuerdos en materia de riesgos laborales y de protección y seguridad de los trabajadores médicos, entre otras acciones.