Una escena profundamente perturbadora ha salido a la luz en Lanzarote, donde una mujer de 34 años fue detenida tras confesar que había dado a luz completamente sola en su domicilio y que, tras el parto, introdujo el cuerpo del feto en una bolsa de basura y lo arrojó a un contenedor cercano.
El caso estalló el 21 de abril, cuando la mujer se presentó en el hospital de Arrecife con una hemorragia uterina intensa. El personal médico del área de Ginecología, al examinarla, comprobó que había estado embarazada de unas 34 semanas, pero sin señales de haber recibido atención médica durante el parto. Esta alarmante situación activó de inmediato el protocolo policial.
Durante los interrogatorios, la mujer rompió su silencio y confesó que dio a luz completamente sola, sin ayuda ni testigos, y que poco después se deshizo del feto como si fuera un residuo. No había contado a nadie de su entorno sobre el embarazo y nunca acudió a revisiones médicas.
Agentes de la Policía Nacional, junto a trabajadores del vertedero de Zonzamas, llevaron a cabo una minuciosa búsqueda entre los residuos procedentes del contenedor señalado. Sin embargo, no lograron encontrar el cuerpo, lo que impide determinar con certeza si el suceso fue un aborto espontáneo o provocado.
La mujer fue puesta a disposición judicial. La jueza de guardia ordenó su libertad con cargos, mientras la investigación continúa abierta y se exploran nuevas líneas para esclarecer el dramático suceso.