El torero Curro Romero, de 91 años, continúa ingresado en el hospital Virgen Macarena de Sevilla, donde permanece en observación por un proceso infeccioso acompañado de una importante bajada de tensión. Aunque su estado no reviste gravedad, el tratamiento antibiótico que se le ha prescrito ha aconsejado prolongar su estancia hospitalaria, según fuentes cercanas a la familia citadas por Efe.
La previsión es que pueda recibir el alta entre este domingo y el lunes, si la evolución continúa siendo favorable. Según sus allegados, el legendario diestro de Camas presenta buen aspecto y se encuentra de buen ánimo.
Este nuevo contratiempo de salud se produce apenas un año después de que Curro Romero sufriera una fractura de cadera en su domicilio, en mayo de 2024. En aquella ocasión también fue tratado en el Virgen Macarena, centro al que ha vuelto ahora para superar este episodio.
Una leyenda nonagenaria
El pasado 1 de diciembre, Romero celebró su 91 cumpleaños. A pesar de su edad, mantiene cierta vida pública y fue visto en buen estado hace apenas una semana, durante el pregón taurino del Real Círculo de Labradores de Sevilla, pronunciado por el periodista Chapu Apaolaza. El acto, que sirvió de homenaje al también matador Juan Antonio Ruiz Espartaco, contó con la presencia discreta pero significativa del veterano torero.
Conocido como el Faraón de Camas, Curro Romero es una de las grandes figuras de la tauromaquia del siglo XX. Su estilo inconfundible y su prolongada carrera lo han convertido en un mito vivo para varias generaciones de aficionados.