El son. Esa es la clave. Ese es el tempo. Y el ritmo. Xavi Gómez lo ha vuelto a hacer. Le das una idea. La pilla al vuelo. Y te devuelve una canción inspiradísima, pegadiza, redonda. O eres un sosaina y un desaborido de los pies a la cabeza o te arrancas a bailar poseído por el ritmo, por el son, por la electricidad de esta estupenda canción.
Xavi clava la banda sonora de este mercado del territorio y del mundo (los buenos mercados son un sabrosísimo revoltijo de influencias). Lo hizo con el “Saboreando la vida”, con el “Fem poble” (homenaje al Lou Reed de “Walk on the wild side”) y con este “Bailando al son del buen vivir”. Este título es el lema del sexto aniversario de Els Magazinos, el mercado cultural y gastronómico de Dénia, el mercado de la utopía posible de un mundo mejor. La palabra “son” fue la clave. El son es un género popular y de la calle, una cadencia cubana, caribeña, un irrefrenable deseo de bailar.
La terraza La Rosa, un espacio excepcional para estos cercanos conciertos / Miguel Padilla
El son. Asombra el genio de Xavi Gómez y su “tropa” (Elena Almendros, el saxofonista Javier Forner y el percusionista Max Moya) para dar con el tono, con el estribillo justo, sencillo y magnético que cada año, que cada aniversario pide este mercado del buen vivir.
Pillarle el latido, el duende, el compás
La Rosa, maravillosa terraza, se puso a bailar. Llena. El público quiere música, quiere música en directo. El público quiere buena, buenísima música en directo. El son es una incitación invencible a bailar. Xavi y sus músicos contagian la felicidad del ritmo, del son, de las letras llenas de vida.
El sexto aniversario es de baile, de son, de buen vivir. Y estos músicos encarnan todo eso. Improvisan. Disfrutan. Jazz, bossa nova, flamenco, funk, son… fusión de la buena. Esta música es como este mercado: territorio y gozosas influencias. Abierto. Más que crear la banda sonora de Els Magazinos, lo que hacen Xavi y sus músicos es pillarle el latido, el duende y el compás a este mercado de Dénia. Y todos se arrancan a corear el “seis años cantando a la vida, seis años bailándole al sol”. Todos. Electricidad. Conexión. Difícil de explicar. Hay que vivirlo.