Este dos de mayo se cumplen dos meses del bloqueo a la entrada de ayuda humanitaria en Gaza. Naciones Unidas ha confirmado que el Programa Mundial de Alimentos (PMA) ya no dispone de reservas de alimentos en la región. Acción contra el Hambre, uno de los únicos socios del PMA con suministros de alimentos en el norte de Gaza, cuenta con tres semanas de suministros de alimentos en el norte y dos en el sur para las cocinas comunitarias. Las organizaciones humanitarias tienen más de 171.000 toneladas de reservas de alimentos (equivalentes a raciones de alimentos para toda la población, 2,1 millones de personas, para tres o cuatro meses) fuera de Gaza, en la región, listas para ser transportadas a la Franja si se concede el acceso.
«La ayuda humanitaria sigue siendo la principal fuente de alimentos para el 80% de los hogares en todas las gobernaciones, mientras que la producción de alimentos y los sistemas alimentarios en Gaza se han debilitado gravemente», explica Natalia Anguera, responsable de operaciones en Oriente Medio de Acción contra el Hambre. «Esto significa que, si se sigue bloqueando la entrada de ayuda humanitaria, 8 de cada 10 familias de Gaza no podrán acceder a los alimentos». Añade: «La falta de alimentos, agua potable y medicinas está provocando un aumento de la malnutrición infantil, que conduce al retraso del crecimiento, y necesitan una cantidad y calidad suficientes de nutrientes para sobrevivir.»
116.000 toneladas de comida bloqueadas
«Gaza vive una situación más catastrófica que nunca debido al bloqueo israelí a la entrada de toda ayuda humanitaria, que este viernes cumplirá dos meses», advirtió ayer el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus.
«Dos millones de personas están sufriendo mientras 116.000 toneladas de alimentos están bloqueadas en la frontera, a unos minutos de distancia», ha lamentado Tedros en una rueda de prensa para los miembros de la Asociación de Corresponsales Acreditados ante la ONU en Ginebra (ACANU).
Del mismo modo, hay gente que muere por enfermedades evitables, o por la infección de sus heridas, cuando los camiones al otro lado de la frontera podrían llevar los desinfectantes y medicamentos que podrían salvarles, ha señalado.
«El aumento de las hostilidades, las órdenes de evacuación y el bloqueo de la ayuda están provocando una afluencia de heridos a un sistema de salud que ya está en muy mala situación», y en el que se están agotando los medicamentos esenciales, ha asegurado.
«Nos hemos visto obligados a priorizar y distribuir la ayuda en función del grado de necesidad», afirma un trabajador de Acción contra el Hambre en Gaza cuya identidad debe permanecer en el anonimato. «Se trata de una medida muy difícil, ya que significa que algunas familias pueden no recibir la ayuda que necesitan, a pesar de las circunstancias de emergencia.