Los nuevos tratamientos destinados a reducir los niveles de colesterol en sangre cobraron protagonismo en el marco de la celebración del 37º Congreso de la Sociedad Canaria de Cardiología (Socancar), un encuentro que acogió entre el pasado viernes y el sábado el Hotel Cordial Mogán Playa, en Gran Canaria. «Está demostrado que el colesterol LDL -conocido como colesterol malo- es el factor etiológico de la ateroesclerosis. Por tanto, cuanto más bajo son los niveles, menor es el riesgo de sufrir este síndrome, que puede derivar en un infarto de miocardio o en un ictus», advirtió el doctor Antonio García Quintana, especialista en Cardiología en el Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín.
En esta reunión de expertos, el facultativo protagonizó una ponencia centrada en el control agresivo y precoz del colesterol. En ella, puso de relieve la revolución que han supuesto los medicamentos que han irrumpido en el mercado en los últimos años, pues permiten que los pacientes reduzcan de forma significativa los niveles de este lípido.
«Los parámetros que miden la concentración de colesterol LDL pueden situarse hasta en los 130 mg/dl en el caso de las personas sanas, mientras que en aquellas que han sufrido un infarto deben estar por debajo de los 55 mg/dl, algo que era muy difícil de lograr solo con pastillas. De hecho, solo lo conseguía entre un 20 y un 30% de los afectados», anotó el experto. Gracias a los nuevos fármacos, las cifras han mejorado y las tasas de éxito ya rondan entre el 68 y el 70%.
Revolución
El cardiólogo prestó especial atención al inclisirán, un principio activo basado en la tecnología ARN -ácido ribonucleico- que puede actuar a nivel intracelular y disminuir la expresión de la proteína PCSK9, que está implicada en el metabolismo del colesterol LDL.
Según expuso, el Hospital Negrín lleva tres años inmerso en dos ensayos clínicos con este fármaco. Uno de ellos está enfocado en los pacientes que ya han sufrido un ictus o un infarto, mientras que el otro se centra en la prevención primaria e involucra a aquellos que no han sufrido ningún evento, pero que tienen un alto riesgo a padecerlo. Además, informó de que el complejo en el que trabaja también hace un seguimiento exhaustivo de todas las personas que son tratadas con este producto en el centro.
«Hemos apreciado que los resultados son muy buenos. En el 86% de los casos, conseguimos que los niveles bajen de los 70 mg/dl y en el 68% que se sitúen por debajo de los 55 mg/dl», aseveró el especialista.
Inclisirán se administra por vía subcutánea dos veces al año. El medicamento, que está comercializado bajo el nombre de Leqvio, está financiado por el Ministerio de Sanidad en las farmacias hospitalarias para los pacientes que presentan dislipemia familiar -hipercolesterolemia hereditaria- o que han sufrido algún evento cardiovascular. «Debe tomarse junto con las estatinas, unos fármacos muy seguros que constituyen la base del tratamiento del colesterol», detalló el doctor García.
La ateroesclerosis es una enfermedad que se caracteriza por la acumulación de grasa en las arterias, lo que puede estrecharlas y obstruirlas. Esta patología puede causar enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares. Entre las personas que presentan un mayor riesgo a padecerla, destacan los pacientes que manifiestan unos niveles altos de colesterol, aquellos que sufren hipertensión, la población aquejada de diabetes tipo 2 y la fumadora. «Las placas de ateroma que se forma son regresivas. Tanto es así, que hemos visto que disminuyen de tamaño con la bajada intensiva del colesterol», apuntó el sanitario.
No obstante, existen una serie de hábitos que pueden ayudar a prevenir su aparición. Algunos ejemplos los ponen el seguimiento de la dieta mediterránea y la práctica de ejercicio físico. Al listado se suma la importancia de evitar tanto el estrés como el consumo de tabaco.
«Canarias es una de las comunidades con más incidencia de la cardiopatía isquémica y una de las que concentra más población con unos niveles elevados de colesterol. Por tanto, la región se beneficia mucho de las estrategias de prevención», valoró el doctor.
Otros de los temas candentes del congreso fueron la obesidad y el arsenal de fármacos inyectables que ha surgido para mejorar su tratamiento. «La semaglutida y la tirzepatida – los principios activos de estos medicamentos- han demostrado ser eficaces para provocar una pérdida de peso y hacer que los pacientes tengan menores probabilidades de sufrir infartos, ictus o insuficiencia cardíaca», apostilló Antonio García.
Suscríbete para seguir leyendo