La Copa del Rey celebrada este sábado en Sevilla no se zanja solo con la victoria del Barcelona sobre el Real Madrid. Deja también tras de sí un nuevo choque político entre el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, y la ministra de Hacienda y líder del PSOE andaluz, María Jesús Montero, cada vez más frecuentes aunque oficialmente la campaña autonómica esté aún lejos.
¿El motivo? Los lugares que ocuparon en el palco de autoridades del Estadio de La Cartuja, donde Moreno quedó relegado a un segundo plano institucional –a dos lugares a la izquierda de Felipe VI–, mientras la vicepresidenta primera se situaba a la derecha del rey en representación de un ausente Pedro Sánchez.
Es algo que ya sucedió en la final del año pasado de la Copa del Rey, también celebrada enSevilla, pero este año adquiere más carga política al ser Montero líder del PSOE andaluz. Ante la circunstancia, Moreno, que ha subrayado que no quiere «entrar en polémicas», ha criticado que se usara «un protocolo para desplazar al presidente de la Junta de Andalucía».
«Aquellas que quieren ser presidentas de la Junta de Andalucía deberían pensar cómo se sentirían si mañana le desplazaran en su territorio siendo presidente del Gobierno de Andalucía. O si ella sería capaz de hacerlo en Cataluña o el País Vasco«, ha comentado a periodistas en Jerez, donde asiste este domingo al Gran Premio de España de Motociclismo.
Así las cosas, lo visto este sábado en La Cartuja le parece «un exceso» con incluso «un publirreportaje en una televisión concreta durante el descanso», en el que la ministra de Hacienda atendió a los micrófonos de TVE.
En todo caso, ha insistido en que le parece «importante respetar los espacios y la dignidad» de los diferentes cargos.
Tensiones por protocolo
No es la primera vez que existen tensiones entre ambos por el lugar protocolario que ocupan en ciertos actos públicos, prácticamente inevitables cada vez que coinciden puesto que Montero es vicepresidenta primera del Gobierno.
El primer malestar se remonta de hecho a los días en que la ministra de Hacienda esperaba a ser ratificada oficialmente como líder del PSOE andaluz: en enero acudió por sorpresa a un acto en Málaga donde apenas estaba anunciada la presencia del ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública, Óscar López y el propio Moreno.
Allí, la ministra de Hacienda avanzó las cifras concretas de inversión del Ejecutivo central en un relevante proyecto tecnológico en la zona. El gesto se entendió en diferentes círculos de la política andaluza como un precedente de la estrategia de Montero para animar con su llegada desde Madrid la carrera para recuperar la Junta; las elecciones autonómicas siguen teniendo como fecha estimada junio de 2026.