Yolanda Díaz canta victoria tras la desautorización de Sánchez a Marlaska y garantiza que no habrá otra crisis por las armas

Al final, la moneda ha caído de su lado. La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, se ha apuntado este jueves un tanto al conseguir que Pedro Sánchez desautorice al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, por la compra de 15 millones de balas a una empresa de Israel.

«Hemos parado un contrato que es una vulneración flagrante de la legalidad internacional, el comercio internacional y los acuerdos de Gobierno», aseguró Díaz, después de conocerse que Pedro Sánchez echaba atrás la compra.

Como gesto, Yolanda Díaz también sugirió que no habrá otra crisis en la coalición del Gobierno por este motivo, donde partidos como Izquierda Unida presionan en contra del aumento del gasto militar y la compra de armas. Aunque habrá que ver si es así, ya que Sumar llevó al Gobierno a la Audiencia Nacional por envíos de armas a Israel, tal y como contó este diario.

El Gobierno da así por zanjada una situación que se desató el pasado martes, cuando el Consejo de Ministros aprobó un plan para que el gasto en defensa llegue al 2% del PIB, y se agravó el miércoles cuando se conoció que España seguiría adelante con la compra de balas a Israel.

Este último escollo se debió a que, según había explicado el Ministerio del Interior, se había intentado rescindir el contrato de compra de los proyectiles, pero la Abogacía del Estado se lo había desaconsejado. 

Según fuentes de Interior, el informe de la Abogacía del Estado descartaba la ruptura del contrato y explicaba que España tendría que pagar los 6,6 millones de euros de dicho contrato, aunque no se recibieran las balas. Es decir, que habría que pagar igualmente aunque no se recibieran las balas.

Sumar lanzó dos comunicados exigiendo la anulación del contrato e Izquierda Unida fue más lejos, abriendo la puerta incluso a su salida del Gobierno. El departamento de Marlaska justificó la compra hasta ayer, cuando Sánchez ordenó dar marcha atrás.

Desautorización a Marlaska

Tras el revuelo generado, Sánchez ordenó al Ministerio del Interior «rescindir de forma unilateral» el contrato de compra de los más de 15 millones de balas. Se trata de una desautorización en toda regla a Marlaska, cuyo departamento había dicho que no se podía echar atrás.

Según explicaron fuentes de Moncloa, se denegará a la empresa israelí IMI Systems el permiso de importación de este material a España «por razones de interés general». Acto seguido, Interior rescindirá el contrato mientras que la Abogacía del Estado y los ministerios competentes ya estudian posibles reacciones legales y reclamaciones.

A pesar de la victoria, que Izquierda Unida también se ha apresurado a anotarse, los partidos que conforman la coalición Sumar se reunieron la tarde de este jueves y pusieron varias ideas en común. La más importante: criticaron que el PSOE tome decisiones unilaterales y que sólo respondan a la presión tras pulsos externos.

La compra de armamento a Israel es un ejemplo, pero la tributación del IRPF a los perceptores del SMI es otro, también reciente.

Yolanda Díaz tiene una situación muy delicada dentro del Ejecutivo y en el llamado espacio a la izquierda del PSOE. Hay asuntos, como los relativos a las armas, en los que la rama socialista toma decisiones unilaterales.

Además, la vicepresidenta tiene a Izquierda Unida reclamando autonomía por encima de Sumar y siendo más duros en este tipo de cuestiones. De hecho, cuando Izquierda Unida abrió la puerta a salir del Gobierno, Sumar rápidamente cerró esa vía. Y desde fuera, Podemos sigue queriendo liderar el espacio a la izquierda del PSOE. 

El cisma por el asunto de las armas ha servido para que otros socios habituales del PSOE en el Congreso de los Diputados hurguen en la herida. ERC, Bildu y el BNG han registrado una iniciativa en el Congreso de los Diputados para exigir la comparecencia urgente del ministro Marlaska en la Cámara Baja.

Las formaciones denuncian «el incumplimiento de los compromisos adquiridos para finalizar toda transacción de material frente al ataque y genocidio perpetrado contra el pueblo palestino y reclaman aclarar las responsabilidades derivadas por estas actuaciones».

Esto mismo es algo que iba a registrar Sumar, también, como forma de presión al Ejecutivo. Pero Sánchez ha acabado desempatando a favor de Díaz y no de Marlaska.

Fuente