El nuevo conservatorio Julián Orbón abrió sus puertas ayer, en la calle de La Ferrería. Y lo hizo sin apenas meter ruido: alumnos (algo más de doscientos) y profesores se encontraron con el nuevo equipamiento ya abierto al público tras el fin del periodo de vacaciones de Semana Santa. Todos, o la inmensa mayoría, dieron aprobado alto a la actuación. El «viejo» Julián Orbón en el Palacio de Balsera, en el cruce de calles de Julia de la Riva y Álvarez Acebal, será ahora sometido a obras de mejora para, en un futuro, darle algún uso cultural pendiente de definir.
Los primeros alumnos del Conservatorio en la sede de la Ferrería, este martes. / M. Villamuza
Ahora el «Julián Orbón» inicia una nueva etapa de amor a la música con moqueta y auditorio: 27 aulas perfectamente insonorizadas, sala de ensayos, auditorio… Ayer fue el primer día para 240 alumnos de entre 6 y 80 años que comenzaron el tercer trimestre en la nueva ubicación: el antiguo edificio de Correos en la calle de La Ferrería, que es ya un cajón de sueños con melodía y magia cultural. La previsión es que la inauguración oficial sea con puesta de largo, y música, incluso desde las ventanas.
En este complejo de 1.200 metros cuadrados trabajarán un total de 29 profesores, los mismos que estaban en esta última etapa en el palacio de Balsera.