El obispo electo de Córdoba, monseñor Jesús Fernández González, ha reaccionado también al fallecimiento del papa Francisco y ha reconocido que «su muerte nos ha sorprendido», pese a que su salud era frágil, y ha encomendado al Señor el alma del Papa «en un contexto de fuerte polarización, violencia, injusticia y pobreza«.
Jesús Fernández ha destacado, como no podía ser de otra manera dado también sus propios principios, «la profunda humanidad del papa Francisco en momento de fuerte secularización y su honda fe en Jesucristo», que lo ha llevado a tender puentes durante su pontificado apostando «por la paz y poniéndose al lado de los inmigrantes, de los pobres y excluidos».
Al mismo tiempo, -ha subrayado el obispo electo de Córdoba-, el papa Francisco «ha tratado de configurar un Iglesia cercana a las necesidades de los hombres, compasiva y misericordiosa ; una Iglesia que confiada en la presencia del Resucitado navega por los mares de este mundo para llevar la alegría del Evangelio a todos y particularmente a las periferias existenciales».
Los encuentros de Jesús Fernández y el Papa
El pasado 13 de marzo se cumplieron 12 años del pontificado del papa Francisco, que nombró a Jesús Fernández obispo de Córdoba el pasado 27 de marzo. Fernández ha tenido «la fortuna de saludarle seis veces», según él mismo ha contado, siendo en diciembre de 2013 el primer encuentro, tras ser nombrado obispo auxiliar de Santiago de Compostela. En ese encuentro, asegura en un artículo de opinión publicado en el Diario de León, en los pocos segundos de encuentro, hablaron de fútbol, una afición que los unía.
Uno de los últimos encuentros de Jesús Fernández con el Papa se llevó a cabo en 2022, cuando una delegación de Cáritas España visitó al pontífice con motivo del 75 aniversario de la fundación de esta institución. En la cita el papa Francisco destacó el trabajo de la institución humanitaria como «esa mano tendida que es de Cristo».
