Un parque es un lugar que mucha gente visita de manera diaria para pasear, disfrutar de la naturaleza, desconectar del ritmo atroz que la vida impone en todos, en definitiva,un momento para buscar una conexión con cada uno mismo, olvidarse de los problemas cotidianos o, en caso de no poder dejarlos de lado, buscar soluciones para afrontarlos.
Algunos bares intentan aprovechar de su ubicación dentro de un parque para darle a los ciudadanos de disfrutar de estos espacios verdes tomando una cerveza, comiéndose unas tapas o incluso disfrutando de música al aire libre.
El Parque Tío Jorge es famoso en Zaragoza y uno de los parques más transitados por detrás del Parque Grande José Antonio Labordeta y el Parque Macanaz situado en la Ribera del Ebro junto al centro deportivo de Helios. Además, es el encargado de recibir a miles de personas en días como la Cincomarzada. Por ello es un lugar adecuado para buscar tener tu negocio dentro de un espacio natural y transitado.
Así lo entendió Lorena Fernández que, tras ver este sitio cerrado durante mucho tiempo, se lanzó al mundo del emprendimiento y apostó por construir lo que hoy en día se conoce como El Jardín de Jorge. En la actualidad es el único bar en activo en dicho parque y, por esto, es conocido por toda la gente de la zona y, también es visitado por las personas que se acercan a verlo desde otros barrios de Zaragoza. «Lo vi, sabía que llevaba mucho tiempo cerrado y me parecía un lugar idílico para tener un bar, entonces me lancé a por ello. Además, es el único bar que está situado dentro del parque, lo que lo hace todavía más especial», comenta Lorena, la gerente del negocio.
El Jardín de Jorge abre sus puertas, desde hace 10 años, aproximadamente a mediados de febrero, cuando el tiempo empieza a mejorar y, con ello, las terrazas comienzan a coger vida en la ciudad. Desde esta fecha de apertura hasta finales de noviembre siempre se podrá ver abierto este lugar. Además, los martes están disponibles desde las 17:00h y de miércoles a domingo desde las 12:00h.
Un aforo que permite organizar grandes espectáculos
El lugar cuenta con una pequeña zona interior con una capacidad muy limitada, pero lo más importante e imponente de este sitio es su gran terraza que cuenta con capacidad para albergar alrededor de 100 personas para que disfruten del buen tiempo durante una tarde primaveral, veraniega u otoñal siempre y cuando la meteorología ayude. «Dentro apenas tenemos cuatro mesas, la terraza es lo que da la vida al Jardín de Jorge. Eso y estar en medio de la naturaleza», afirma Lorena.
Además, con esta terraza, El Jardín de Jorge la aprovecha para ofrecer espectáculos en directo como son algunos conciertos que organizan para el disfrute de los clientes, catas de vino o eventos más infantiles para que los más pequeños se entretengan y puedan disfrutar de la naturaleza que ofrece el parque. «Realizamos todo tipo de conciertos en directo, catas de vino porque gustan mucho y, para los más pequeños, hacemos de vez en cuando algún espectáculo infantil como de magia, etc…», habla Lorena.
El tipo de comida, de lo más variada
Si nos vamos hacia la comida que se ofrece, se pueden encontrar todo de productos de calidad y una carta de lo más variada. «Tenemos una carta muy amplia, desde chuleta de vaca, tataki o huevos rotos. Lo que más recomendamos y lo que suele triunfar es el tataki y las comidas que contienen patata, ya que son naturales», finaliza Lorena.
Este tipo de locales consiguen que ir al parque no solo sea para pasear, sino que también sirvan a las familias y amigos como excusa para juntarse, crear vínculos de unión y, al fin y al cabo, relacionarse, ya que los seres humano sin esa característica perderíamos gran parte de nuestra esencia, y gracias a sitios como El Jardín de Jorge esa cualidad seguirá estando presente.