Se cumplieron las
previsiones y la jornada del Martes Santo ha estado marcada por la
lluvia, que ha impedido la salida de las cuatro cofradías programadas. Desde la mañana los pronósticos dibujaban un panorama
poco alentador y llegado el momento en que debían comenzar las
estaciones de penitencia, la situación dejaba poco lugar a dudas.
Las hermandades fueron suspendiendo sus procesiones conforme al turno
de salida.
Es una situación especialmente dolorosa para las corporaciones de este día, que en los últimos cinco años solo han podido salir a la calle en una ocasión. Sin embargo, la fortaleza social de estas cofradías no les ha impedido que durante este período hallan aumentado el número de hermanos y las papeletas de sitio.
lanzada y vía crucis
Primero se suspendió la Lanzada. Tras el anuncio se abrieron las puertas de la Parroquia de
los Dolores, donde una multitud aguardaba para entrar en el templo. Después lo hizo el Vía Crucis, que rezó la oración que
le da nombre y que es también su titular. Lo hizo con las puertas de
San Juan de los Reyes abiertas, para que pudieran sumarse los devotos
que lo desearan. Tras este momento, abrieron la capilla de salida para la
veneración.
esperanza y humildad
Las dos últimas en
suspender la salida fueron la Esperanza, donde el número de hermanos
que iba a participar en el cortejo era tal, que tuvieron que rezar, ta y como es habitual en estos casos por turnos, en el interior de la Parroquia de Santa Ana. Tras abrir
las puertas, numeroso público también visitó a la Virgen y al
Señor. Por último, la Humildad anunció que no salía en procesión.
Después de la celebración de la Santa Misa, abrieron las puertas de
la Parroquia de Santa Escolástica (Santo Domingo), tras colocar los
pasos junto al altar mayor para facilitar su veneración.
granada con sus cofradías
Como es habitual, miles de
granadinos se acercaron a los templos de los que no pudieron salir
las cofradías. Por momentos, las colas duraban más de cuarenta y
cinco minutos, en ocasiones bajo una lluvia intensa. El Martes Santo
de 2025 se ha parecido demasiado a otros muy cercanos en el tiempo.
Ha sido un momento propicio para recordar que aunque en el calendario
cofrade de las corporaciones penitenciales ocupa un lugar destacado
la procesión, sus actividades permiten a los hermanos participar de
la vida cristina durante otros muchos momentos del curso.