Las condiciones más secas en la cara oculta de la Luna —un fenómeno descubierto gracias a las muestras de rocas traídas por la misión lunar Chang’e-6 de China— podrían estar relacionadas con antiguos impactos de meteoritos, según una hipótesis de científicos.
En un estudio publicado este miércoles en la revista Nature, científicos chinos revelaron que el manto lunar contiene menos agua en la cara oculta en comparación con la cara visible. De hecho, en cada gramo de la gruesa capa rocosa bajo la superficie de esa zona se encontraron menos de 2 microgramos de agua, el nivel más bajo jamás registrado.
La superficie de la Luna está llena de cráteres de diferentes tamaños provocados por impactos de meteoritos, y el más grande y antiguo de todos es la Cuenca Aitken, con un diámetro de 2.500 kilómetros.
Hu Sen, investigador del Instituto de Geología y Geofísica de la Academia de Ciencias de China, sugiere que el antiguo impacto que formó esta cuenca podría estar relacionado con la baja cantidad de agua en el manto de la cara oculta lunar.
«La Cuenca del Polo Sur–Aitken, donde recolectamos las muestras, se formó por un impacto que pudo haber afectado el manto lunar, provocando un reagrupamiento y redistribución del agua. Este impacto quizá hizo que parte del agua del manto de la cara oculta fluyera hacia la cara visible, lo que podría explicar las diferencias en el contenido de agua,» explicó Hu.
Otra posible razón para que el manto de la cara oculta sea más seco podría estar relacionada con el proceso de estratificación que ocurrió cuando el océano de magma de la Luna se enfrió y comenzó a cristalizarse.
La cara oculta de la Luna, más seca, podría deberse a un antiguo impacto de meteorito, según científicos. / CMG
Durante las primeras etapas de formación de la Luna, la energía liberada fue tan intensa que todo su cuerpo quedó cubierto por un océano de magma. Con el tiempo, ese océano se fue enfriando y solidificando, formando distintas capas en el manto, según lo que entiende actualmente la ciencia.
«Si ese océano de magma se cristalizó, es probable que haya creado capas diferenciadas. Las muestras de basalto que recolectamos en la cara oculta podrían provenir de capas más profundas del manto que se solidificaron antes, lo cual explicaría su menor contenido de agua. Aun así, estas ideas siguen siendo hipótesis y necesitan más investigación,» añadió Hu.
La sonda lunar Chang’e-6 fue lanzada a principios de mayo de 2024, aterrizó en la Cuenca del Polo Sur-Aitken y regresó a la Tierra a finales de junio con más de 1.935 gramos de muestras —las primeras tomadas jamás de la cara oculta de la Luna, una región todavía poco explorada.