El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, reivindicó este jueves su defensa de «un mundo de puertas abiertas» y la búsqueda de nuevos socios, tras las críticas de Estados Unidos por su acercamiento a China y la tregua arancelaria del país norteamericano, que cree que da pie al diálogo.
Sánchez, de visita oficial en Vietnam antes de viajar en esta jornada a China para reunirse con el presidente de este país, Xi Jinping, volvió a apostar por el libre comercio en su intervención en un foro empresarial hispano-vietnamita.
No hubo en su intervención ninguna mención a la crítica del secretario estadounidense del Tesoro, Scott Bessent, quien reprochó a España defender alinearse más con China y advirtió de que eso «sería como cortarse el cuello«.
Pero sí se refirió al paso atrás anunciado por el presidente de EEUU, Donald Trump, en su guerra comercial al dar una tregua de 90 días para aplicar la mayor parte de los aranceles previstos, aunque excluyó de la misma a China, cuyos gravámenes se han elevado ya al 125%.
Los aranceles que había previsto la administración estadounidense dijo que eran injustos e injustificados (citando en concreto el «escalofriante» porcentaje del 46% para Vietnam) y que provocaban una guerra comercial en la que nadie gana y todos pierden.
Por eso consideró que la tregua arancelaria, a falta de conocer los matices de la misma, es «una puerta a la negociación y el acuerdo entre países».
En la línea de los argumentos que ha venido defendiendo, Sánchez recalcó su apuesta por «un mundo de puertas abiertas» en el que el comercio une a los pueblos.
«El comercio no es un juego de suma cero. Si uno gana, el otro también puede ganar. De hecho, nosotros solo lo concebimos así. Solo hacen falta unas reglas justas», subrayó. Esa dijo que es la hoja de ruta de Europa y que aseguró que no sólo se va mantener, sino que se va ampliar y se va a perseverar en ella «con nuevos socios» y con una apuesta firme y decidida por el multilateralismo.
Antes de su intervención, su ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, quien le acompaña en su gira asiática, consideró en una conversación informal con periodistas que la tregua arancelaria de Trump es una buena noticia porque permite el diálogo.
Pero insistió en defender el acercamiento de España y la Unión Europea a otros socios, como China, y enmarcó en la normalidad la visita que este jueves iniciará Sánchez al gigante asiático.