El PP sigue en una posición de desconfianza. A pesar de que seguirá negociando con el Gobierno el plan contra los aranceles de Estados Unidos, la entrada de Junts en la ecuación incomoda a los conservadores hasta el punto de que ahora parecen más lejos de poder apoyar el real decreto ley con las primeras ayudas. Mientras Juan Bravo, responsable económico del PP se dirigía al ministro Carlos Cuerpo desde la tribuna de oradores, Alberto Núñez Feijóo zanjaba la nueva postura desde Bruselas tras reunirse con Ursula Von der Leyen y los comisarios europeos de Comercio y Defensa: “Hoy no estamos más cerca que ayer de apoyar ese real decreto ley, que es un parche y no una solución ante las dificultades de las empresas españolas”.
A continuación, el líder del PP justificó los últimos giros del partido -que primero parecían estar más cerca y a última hora del martes dieron casi por dinamitado el diálogo: “Nosotros no nos hemos movido, se ha movido el Gobierno. Seguimos con nuestro plan a disposición Seguimos con nuestras medidas estructurales para mejorar la competitividad”, remachó Feijóo afirmando que es el Ejecutivo el que se ha alejado -aquí vino el gran reproche- “intentando introducir disposiciones adicionales para garantizar los votos del separatismo en base a criterios territoriales para distribuir las ayudas”.
“Nosotros en ningún caso vamos a discriminar empresas en función del territorio donde se ubica”, volvió a decir Feijóo a pesar de que tanto el ministro Cuerpo como la vicepresidenta María Jesús Montero negaron en varias ocasiones que realmente haya un acuerdo en esos términos.
El líder conservador volvió a defender algunas de sus medidas para hacer frente a los aranceles, mirando especialmente a los “alivios fiscales temporales” tanto en cotizaciones de la seguridad social como en el impuesto de sociedades. “Lo que plantea el Gobierno son préstamos y avales. Y nosotros creemos que las empresas necesitan otra cosa”, recriminó el dirigente conservador. “Si el Gobierno no quiere aceptar ninguna propuesta del PP, el Gobierno se quedará con sus propuestas”.
Aprovechando el nuevo acuerdo de coalición en Alemania entre los dos grandes partidos, Feijóo quiso reivindicar desde Bruselas una vez más la debilidad parlamentaria de Pedro Sánchez, recordando que el Gobierno no tiene presupuestos desde el año 2023. “No ha presentado presupuesto en 2024 y no los va a presentar en 2025. Veremos en 2026. Está incumpliendo la Constitución española”, reiteró, dando por hecho que no lo hace “probablemente porque el Gobierno no está de acuerdo entre sí y por el riesgo de que no fueran aprobados”.