Un Aston Martin DBS como el que usaba James Bond, solo que quien lo usaba era un narcotraficante asentado en el Mediterráneo español. Un Ferrari Testarrosa como el que paseaba por Galicia Sito Miñanco en sus años dorados y un Ferrari 575 Maranello. Son los tres coches que fueron incautados a narcotraficantes españoles primero por la Guardia Civil y la Policía, luego por el juzgado y finalmente por el Ministerio de Sanidad. Los tres pueden comprarse hasta este jueves. Más de 670 personas han pujado ya en la web escrapalia.com, encargada de la venta.
El Ferrari Maranello que se subasta. Ya ha alcanzado los 60.000 euros. / ESCRAPALIA
Los coches pueden visitarse los días 8 y 9 de abril en una nave de Coslada (Madrid). Paco Azores, director de Marketing de Surus Escrapalia, explica el funcionamiento de la subasta. «En la web están las fotos y las fichas de cada coche, en las que se recoge en qué condiciones está. El interesado debe registrarse para poder pujar. Y el día 10 habrá la subasta virtual final». Así por ejemplo, el Aston Martin pasó su última ITV en 2018, antes de ser requisado a una banda de narcotraficantes, y tiene los neumáticos en mal estado. 229 personas han pujado ya por él, la última puja llega a los 98.000 euros.
Tiempo parados
«Es evidente que los tres coches llevan mucho tiempo parados y que no arrancan, por un tema de la batería fundida. No se sabe si necesitarán más inversión», subraya Azores, que añade que, pese a esos inconvenientes, «los coches de los narcos se venden muy bien. Piensa que por noventa mil o cien mil euros el comprador se puede llevar un coche de lujo que en un concesionario les valdría el doble o el triple de dinero. El año pasado ya subastamos un Lamborghini Gallardo de un traficante por 60.000 euros y un Ferrari de otro por 68.000 euros».

Este Aston Martin fue requisado a una banda de narcotraficantes. / ESCRAPALIA
Habrá más subastas porque solo desde 2023, la Guardia Civil y la Policía han requisado Ferraris, Aston Martin y otros coches de lujo en Alicante, Ibiza y Cádiz. En cuanto a los compradores, parece que no les importan los antecedentes de esos coches, de hecho, según Azores, «creo que es positivo para la subasta que hayan sido coches del narco. La gente sabe que los narcos usan coches de lujo y piensa: si lo ha tenido un narco es que es un buen coche».
De hecho, con la subasta en la recta final, los tres coches ya han superado el precio de reserva (el mínimo establecido por el Estado para venderlos). El Ferrari Testarrosa amarillo ya tiene un comprador dispuesto a pagar 96.000 euros por él. Y el otro Ferrari, el Maranello, está en 60.000 euros.

Interior del Ferrari Maranello. El jueves se cierra la subasta para comprarlo. / ESCRAPALIA
Hasta hace año y medio, era el Estado el que se encargaba de subastar los coches, motos, casas, embarcaciones y hasta excavadoras requisadas a narcotraficantes. «No funcionaba muy bien», explica Paco Azores. «Solo se anunciaba en el BOE, la difusión era escasa y los resultados muy pobres. Era muy complicado enterarse, pedían todo tipo de certificaciones… Nosotros nos dedicamos a subastar todo tipo de bienes y en la web tenemos 340.000 clientes registrados». Para esta subasta incluso han contratado a dos influencers para que le dieran visibilidad con un vídeo colgado en Youtube.
Además de estos tres «pepinos» arrebatados a los narcotraficantes, cuya subasta termina este jueves, otros 180 bienes del narco serán subastados por toda España (hay pujas abiertas en Asturias, Cantabria, Guipúzcoa, Málaga, Ibiza…) durante el próximo mes. La mayoría son coches de narcos, aunque menos lujosos. También hay furgonetas, un camión y varios veleros.
El directivo de Escrapalia admite que «puede pasar» que algún amigo o pariente de un narcotraficante nostálgico de su coche acuda a pujar. Fuentes policiales confirman esa hipótesis, aunque en la inmensa mayoría de ocasiones los interesados son coleccionistas. En la ficha de los vehículos vienen todos sus datos técnicos y de conservación. Y uno más, que interesará a todos, narcos o no: como el vendedor es el Plan Nacional Sobre Drogas, quienes ganen en la subasta no tendrán que hacerles factura ni pagar el IVA.