«Hipocresía y cinismo» de la federación hotelera de Mallorca «que intenta culpar a los pequeños propietarios del drama de la vivienda, cuando el verdadero origen del problema es el efecto llamada masivo generado por su propio modelo turístico ultraintensivo». Con estas acusaciones ha reaccionado la patronal del alquiler turístico Habtur-Balears, que preside Antoni Barceló, a las durísimas críticas que contra el Govern han lanzado los hoteleros de la isla ante el borrador del decreto para la contención, contra la oferta ilegal y para la calidad turística, cuyo contenido ha sido adelantado hoy por Diario de Mallorca.
El nivel de agresividad verbal que las medidas previstas por el Ejecutivo de Marga Prohens ha desatado se refleja tanto en el comunicado emitido por la patronal hotelera contra las mismas como en la respuesta de Habtur a esta última, en la que se acusa esos empresarios de ser «expertos en obviar interesadamente el peso real del sector hotelero, que ha crecido de manera exagerada y ha concentrado recursos, suelo y mano de obra, a menudo sin generar un impacto positivo proporcional en la calidad de vida de los residentes».
Problemas de convivencia
La asociación de alquiler turístico acusa al modelo hotelero de «generar problemas de convivencia, presión urbanística y especulación», y de atraer a «cientos de miles de trabajadores, a menudo en condiciones precarias, que han de competir por viviendas con la clase media y trabajadora residente», disparando los precios y «expulsando a miles de personas de su propio territorio».
Antoni Barceló, presidente de Habtur / B. Ramón
También se acusa a los empresarios hoteleros de haber suprimido los espacios para alojar a sus trabajadores «externalizando el problema a la sociedad». De este modo, se añade, «se empobrece a los residentes mientras se concentran los beneficios en manos de unos pocos».
Defensa del alquiler vacacional
Para defender su actividad, Habtur alega que «el alquiler vacacional representa una parte muy menor de la actividad turística y permite que muchas familias complementen su economía, redistribuyendo riqueza y fomentando un turismo más sostenible».
Se exige a la patronal hotelera de Mallorca que «deje de criminalizar a los pequeños propietarios y comience a asumir responsabilidades. No se puede seguir engañando a la sociedad, ya que los principales responsables del problema de la vivida en Balears tienen nombre y apellido, y son los que más han ganado mientras otros perdían el derecho a vivir dignamente».
La reacción de Habtur concluye que «el nuevo modelo económico que necesita Balears pasa por mantener el alquiler vacacional y reducir las plazas hoteleras».