El central alemán Waldemar Anton fue el futbolista que compareció en Montjuïc junto al técnico, Niko Kovac. Un futbolista procedente del Stuttgart y que está llamado a liderar la defensa y a asumir responsabilidades tras la baja de uno de los puntales como Nico Schlotterbeck.
Anton habló en la comparecencia de lo mal que había sentado a la plantilla la lesión de su compañero y que le querían dedicar una victoria, pues «tenía mucha ilusión por jugar este encuentro. Estamos muy tristes porque es un diez dentro y fuera del campo».
También se le cuestionó a nivel personal sobre si tenía ahora que dar un paso adelante, pero aseguró: «Quiero seguir seguir siendo yo mismo, mi papel no cambia». Para admitir que «quizás alguno tiene que asumir más responsabilidad». Fue fichado por 22,5 millones de euros, así que hay muchas expectativas depositadas.
«Si defendemos bien, podremos tener éxito»
Sobre la capacidad ofensiva del Barça, remarcó, tal y como hizo Kovac, que «son muy completos, pero nosotros tenemos que defender y esforzamos. Si estamos bien posicionados y nos defendemos, podemos tener éxito», se mostró convencido.
Pero lo más destacado fue cuando explicó que su ídolo de la iinfancia fue Gerard Piqué y que aspira a jugar como el central barcelonés. «Piqué fue un ídolo mío, por su forma y su estilo de jugar. Siempre quería buscar soluciones con la pelota y marcaba goles», dijo. «Eso me falta un poco a mí, pero espero llegar», admitió. Para concluir: «Como futbolista, siempre quieres el balón y es el fútbol que yo quiero implantar en Dortmund».