La carabela portuguesa ya está en las costas españolas. Este hidrozoo (no es una medusa) es especialmente temible, debido a que su potente y tóxica picadura puede llegar a causar la muerte en casos extremos. Desde finales de marzo ya son varios los avistamientos registrados en varias comunidades autónomas, por lo que los organismos públicos han activado los protocolos de prevención para informar a la población sobre el peligro que entraña esta especie.
Ya a finales de marzo, la ciudad de Santa Cruz de Tenerife fue la primera en emitir una alerta por la presencia de la carabela portuguesa, que obligó a izar la bandera amarilla en la playa de Las Teresitas.
En Andalucía, son varias las playas donde se ha observado dicho hidrozoo. Es el caso de la playa de Las Olas, en Almería capital, donde se han sido vistos muy cerca de la costa, según informa eltiempo.es. En Huelva han aparecido en Mazagón y Punta Umbría, y también han sido observados en puntos del litoral de Granada y Málaga, como Almuñécar y Motril.
Un ejemplar sobre la superficie del mar, debajo de la cual se ocultan sus tentáculos / iStock
En Baleares, la dirección general de Pesca ha confirmado que la carabela portuguesa ha sido detectada ya en los últimos días en varios puntos del archipiélago. El Govern balear recuerda que, aunque no se trata de una situación excepcional, sí es cierto que la presencia de esta especie es cada vez más habitual.
Urticarias severas y reacciones anafilácticas
El Ejecutivo insular recuerda que las condiciones meteorológicas propias de la primavera, como los vientos de levante y las corrientes, facilitan la llegada a las islas de estos hidrozoos, que se mueven siempre a merced de la corriente, pues carecen de órganos que les permitan nadar.
La picadura de los tentáculos de esta especie resulta especialmente dolorosa y puede provocar desde urticarias severas hasta reacciones anafilácticas en personas sensibles. Es más, en personas con alergias, de edad avanzada o con un débil sistema inmunológico, pueden llegar incluso a provocar la muerte.
La presencia de la carabela portuguesa no es algo raro en España, pero cada vez llega en mayor número y a más lugares, según han constatado los científicos. Desde hace diez años, cada vez se ven más, lo que se atribuye al calentamiento que sufre el Mar Mediterráneo y los cambios en los regímenes de viento y de las corrientes marinas.

La carabela portuguesa puede llegar a provocar al muerte a personas con salud débil / Europa Press
Aunque la parte visible es la que flota sobre la superficie, lo más peligroso está bajo el agua, dado que sus tentáculos pueden alcanzar varios metros de longitud y es allí donde se encuentran los nematocistos, que son pequeñas cápsulas con veneno con las que este animal paraliza a sus presas.
¿Qué hacer si nos pica?
Si nos pica una carabela portuguesa, debemos actuar rápidamente para neutralizar el veneno. Es fundamental no tocarla con las manos y lavar la zona afectada con agua salada o alcohol. No hay que usar agua dulce ni vinagre, ya que pueden empeorar los efectos. El veneno puede provocar desde escozor y picor hasta síntomas más graves como vómitos y fiebre.