Bárbara Rey está en el punto de mira desde que hace una semana el Rey Juan Carlos anunció que ha iniciado acciones legales contra Miguel Ángel Revilla por las declaraciones «difamatorias, injuriosas y reprobatorias» que habría hecho sobre él en los últimos 3 años. Una insólita demanda -siendo la primera vez en sus 87 años que el Emérito toma una medida así para defender su honor- en la que reclama 50.000 euros al expresidente de Cantabria, y que ha hecho que todas las miradas estén ahora puestas en la vedette.