Dos acusados de intentar introducir en España un alijo de 464 kilos de cocaína oculta en cilindros de una máquina trituradora que fue enviado de Colombia a una nave de La Nucía, y posteriormente trasladado a una empresa de Sueca, se han declarado culpables hoy en un juicio celebrado en la Audiencia de Valencia y han sido condenados «in voce» a sendas penas de cuatro años y de tres años, siete meses y quince días de prisión por un delito de tráfico de drogas en grado de tentativa.
La petición de penas, no muy elevada a pesar de tratarse de un alijo de cocaína valorado en casi 19 millones de euros vendida al por mayor en el mercado ilícito, se ha planteado así tras un acuerdo de conformidad alcanzado entre la Fiscalía y los abogados defensores.
Los acusados, un vecino de Sueca condenado a menos de cuatro años que ha sido defendido por el abogado Francisco Miguel Galiana Botella, y otro con domicilio en l’Alfàs del Pi y castigado con cuatro años de cárcel, defendido por el letrado Miguel Ferrer, no tenían antecedentes penales y además de la pena de cárcel han sido condenados al pago de sendas multas de diez millones de euros, sujeta a una responsabilidad personal subsidiaria de 15 días de privación de libertad.
Inicialmente fueron detenidas en enero de 2022 cuatro personas en l’Alfàs del Pi, Alcoy y Sueca por este alijo, aunque la Fiscalía solicitó durante la instrucción de la causa el sobreseimiento para dos de ellas, una de las cuales también estaba defendida por el letrado Francisco Galiana.
Exportación de coca de Colombia a España
La operación antidroga fue realizada por el Equipo contra el Crimen Organizado (ECO) de Alicante, perteneciente a la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, y la Dirección de Vigilancia Aduanera. Los investigadores descubrieron un plan para exportar una cantidad importante de cocaína y averiguaron que la droga llegaría oculta en un contenedor transportado en un buque que zarpó del puerto de Santa Marta en Colombia el 15 de diciembre de 2021. El destino del buque procedente de Colombia era el puerto de València y la Audiencia Nacional autorizó la circulación o entrega vigilada del contenedor sospechoso.
Uno de los dos acusados, el vecino de l’Alfàs, es el director de una empresa metalúrgica con sede social en Madrid que figuraba como compradora de una máquina industrial trituradora. Este procesado contactó meses antes con los servicios aduaneros del puerto de València para indicarles que la dirección de entrega de la mercancía era La Nucía, en concreto en una nave alquilada por el acusado en febrero de 2021 como sede de una empresa de construcción y fabricación metalúrgica.
Sin embargo, tanto en la nave de La Nucía como en la sede social de la empresa en Madrid no se desarrolló actividad mercantil alguna. Los investigadores solo detectaron que en la nave de La Nucía acondicionaron una máquina fresadora destinada a la extracción de la cocaína que iban a traer oculta en una máquina. Dicha fresadora fue trasladada en abril de 2021 a la empresa de Sueca donde meses más tarde fue incautada la droga.
El contenedor donde estaba la droga fue trasladado el 12 de enero de 2022 desde el puerto de Valencia hasta una empresa de Silla, donde un camión lo recogió para llevarlo hasta La Nucía. En la nave alicantina coincidieron los dos acusados y la maquinaria fue traspasada en la misma puerta a un camión pluma que la llevó hasta la empresa de uno de los procesados en Sueca. Los acusados no consiguieron su propósito de extraer la cocaína porque la Guardia Civil y Aduanas irrumpieron en la nave.
Los investigadores tuvieron que solicitar ayuda al Consorcio de Bomberos de Valencia para despiezar la máquina y cortar 14 cilindros de diferentes tamaños y en cuyo interior estaban los 464 kilos de cocaína.