En la historia del fútbol, son muy pocos los equipos que han logrado ganar un triplete. En las cinco grandes ligas, solo pueden presumir de ello Manchester United (1999), Barcelona (2009 y 2015), Inter de Milán (2010), Bayern Múnich (2013 y 2020) y Manchester City (2023). Ampliando un poco la mira, Celtic (1967), Ajax (1972) y PSV Eindhoven (1988) merecen también su reconocimiento.
Ganar un triplete es lo más cercano a la excelencia en el mundo del fútbol. Es la evidencia de que un proyecto no depende de la suerte para ganar títulos, de la solidez del mismo y de la grandeza de su entrenador y sus jugadores, capaces de no conceder absolutamente nada durante toda una temporada, tanto en las competiciones domésticas como continentales.
Los dos únicos sextetes de la historia / FCB
Esta temporada, el PSG de un Luis Enrique que ya tiene marcada la casilla del triplete en su palmarés tras su excelsa campaña con el Barça en 2015, quiere apuntarse el primero de su historia. Sin duda, si los de Al-Khelaïfi lo consiguen antes que clubes como el Real Madrid, el AC Milan o el Liverpool, entre otros, sería un claro golpe sobre la mesa por parte de los parisinos. ¿Pero, hay opciones reales en París?
El PSG quiere su primera Champions
Si la obsesión de Al-Khelaïfi ha sido siempre la Champions League, la de Florentino Pérez es el triplete desde que el Barça conquistara el sextete en 2009 y otro tiplete en 2015. De momento, ninguno de los dos ha conseguido el objetivo.
Desde la llegada de Qatar al PSG en 2011, la inversión en el Parque de los Príncipes ha sido faraónica. A base de millones y millones, el cuadro galo pasó de ser un equipo discreto a ser el ‘gigante’ de Francia. Sin embargo, en Europa nadie los respetaba.
La ausencia de un proyecto sólido y a largo plazo convirtió la capital gala en una trituradora de entrenadores y en un álbum de cromos en el que se ‘pegaban’ estrellas verano tras verano. Con la llegada de Luis Campos, y posteriormente Luis Enrique, el PSG cambió su ‘modus operandi’ y puede recoger los frutos antes de lo esperado.

Luis Enrique, en el duelo disputado en Anfield frente al Liverpool / EFE
Actualmente, el conjunto parisino es probablemente el que más en forma está en toda Europa. El técnico asturiano aprovechó la salida de Kylian Mbappé para hacer fuerte a la plantilla en lo colectivo y ha constituido un equipo ganador, que mezcla la juventud con la experiencia, y que juega a un nivel altísimo.
El PSG ha encontrado a su crack en un Ousmane Dembélé que está brillando a un nivel inédito en su carrera (34 goles en 41 partidos; 25 en 2025), cuenta con varios de los jóvenes más talentosos de Europa y puede presumir de tener, línea por línea, a piezas de primer nivel.
Liga y Copa en el bolsillo
Empezando por las competiciones domésticas, en la Ligue 1, no han tenido rival. 71 puntos en 27 jornadas y 21 unidades de ventaja sobre el Olympique Marsella, es cuestión de tiempo que el equipo de Luis Enrique celebre el cuarto título de liga consecutivo.
En la Coupe de France, el PSG ya está en la final después de no perder los nervios ante el Dunkerque. Sobre el papel, un equipo débil y sin opciones de dar la sorpresa, pero los de Luis Castro, que están cuajando un curso magnífico en segunda división, ganaban 2-0 a los 27 minutos de partido.
Pese al planteamiento completamente defensivo del Dunkerque (un 6-3-1), el PSG pudo derribar el muro y se acabó llevando la eliminatoria por 2-4. En la final, se medirá al ganador del AS Cannes-Reims. Sería muy extraño que el PSG no celebre el ‘doblete’, como mínimo, a final de temporada.
La gran duda: Europa
Las dudas están en la Champions. El PSG no convenció en una fase liga que casi lapida al equipo antes de tiempo, pero acabaron salvando la papeleta con un incontestable 10-0 en el global del playoff ante el Brest. Pese a ello, los de Luis Enrique aún debían quitarse el interrogante de encima.
Lo hicieron contra el Liverpool, líder de la premier y primero en la liguilla de la Champions. Incomprensiblemente, el PSG perdió en la ida en el Parque de los Príncipes, pero completaron una exhibición en Anfield para cargarse al equipo más temido de Europa en aquel momento.

Donnarumma fue el héroe en Anfield / Jon Super / AP
Ya en cuartos de final, el rival a batir es el Aston Villa de Unai Emery, un oponente más asequible que los reds, pero si Luis Enrique ha conseguido algo clave en esta plantilla es que no den ningún partido por ganado antes de jugarlo. Algo esencial para cualquier grupo que pelea por ganar la ‘Orejona’. Que se lo pregunten al Atlético de Madrid de Diego Simeone, que en un chasquido de dedos, se alejó de la pelea por la Liga y se despidió de Europa.
Curiosamente, si el PSG de Luis Enrique cumple ante el Aston Villa, se puede encontrar con el Real Madrid en semifinales, en el caso de que los de Carlo Ancelotti superen al Arsenal de Mikel Arteta en cuartos. De darse este partido, el que quede eliminado se quedaría sin posible triplete, aunque los blancos, a día de hoy, lo tienen más complicado que los parisinos.

Ancelotti, en el partido ante la Real Sociedad / Bernat Armangue / AP
Pese a que ya están en la final de la Copa del Rey después de sufrir de lo lindo para eliminar a la Real Sociedad, el Madrid es segundo en Liga por detrás del Barça de Hansi Flick, que de superar al Atlético de Madrid en Copa esta noche, tendría el triplete un poco más asequible que los blancos. A tres puntos de los culés, el 11 de abril se enfrentan ambos en Montjuïc, partido que puede ser completamente determinante para el desenlace de la competición.
Volviendo al PSG, la Champions es el gran atractivo del club. El principal motivo por el que Qatar desembarcó en París. Poder lograrlo en el segundo año de Luis Enrique, venciendo a equipos como Liverpool o Real Madrid/Arsenal por el camino y firmando un triplete del que solo pueden sacar pecho cinco equipos en las grandes ligas de Europa, sería una absoluta hazaña.
Al principio era una broma, difícil de creer…
Luis Enrique está confiado. «El equipo está preparado para cualquier escenario. Al principio era casi una broma, difícil de creer. Somos jóvenes pero maduros, capaces de manejar este tipo de situaciones. El fútbol también consiste en producir jugadores de alta calidad», aseguró después de vencer al Dunkerque en la Copa.

Dembélé es el máximo goleador de 2025 / @Ligue1_ENG
Solo aquellos que han logrado un triplete saben lo difícil que es conquistarlo. Luis Enrique es uno de ellos. De momento, el PSG tiene que sellar la Liga y la Copa. Después, tiene que ganarse su plaza para la final del 31 de mayo en Múnich. El tiempo dirá.