Las acciones de OHLA han caído un 7,53% después de que el inversor José Elías y tres consejeros afines (Antonio Almansa, Josep María Echarri y Carmen Vicario en representación de Eulalio Poza) presentaran ayer su dimisión. Estos cuatro consejeros entraron en bloque el pasado mes de diciembre y sus participaciones ascienden al 16,79% del capital de la compañía.
Según informó la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), los motivos de su marcha tienen que ver con discrepancias con la gestión financiera y las previsiones de caja, así como con su oposición al cese del director financiero de la sociedad, José María Sagardoy, y con la «la existencia de deficiencias en los procesos de investigación interna sobre posibles irregularidades y conflictos de interés» y «la implementación de medidas que limitan su capacidad de acceso adecuado a información relevante de la sociedad».
Estas presuntas irregularidades tendrían que ver con Antonio Almansa. En concreto, este consejero ha sido investigado por supuesto ‘insider trading’ tras vender 5 millones de acciones por valor de 0,51 euros antes de que se conociera que OHLA debía pagar avales de 39,8 millones de euros por un arbitraje respecto a un proyecto en Kuwait.
Estas ventas se produjeron, según los registros de la CNMV, entre el 13 y el 17 de marzo, a pocos días de que se conociera el laudo. Según publica el diario ‘El Economista’, algunos miembros del consejo de OHLA elevaron este jueves la denuncia a la Comisión de Auditoría y Cumplimiento previa a la reunión del Consejo de Administración, con el objetivo reprobar a Almansa.
Esta sanción se recoge en el escrito presentado tras la reunión del consejo, en el que la compañía detalla que «la amonestación es consecuencia de las operaciones con valores de OHLA el 18 de marzo, mientras estaba en vigor el período de ‘blackout’ de 30 días naturales anterior a la formulación de las cuentas anuales relativas al ejercicio 2024».
Por su parte, fuentes del periódico ‘El Mundo’ informan que Elías se enfrentó con el presidente de OHLA, Luis Amodio, en la Comisión de Nombramientos. Según esta publicación, Elías habría amenazado al mexicano con «complicarle la presidencia si continuaba en la empresa», lo que Amodio interpretó como un intento de chantaje y provocó la dimisión en bloque de Elías y sus consejeros afines.
Cabe señalar que Elías no puede vender su participación en OHLA por el compromiso como parte del plan de recapitalización destinado a reforzar la posición financiera de la constructora. ste compromiso lo llevó a asumir el cargo de vicepresidente de la compañía.
Para los expertos de Banco Sabadell, estas noticias son claramente «negativas» por «la incertidumbre en torno a la continuidad en el capital de accionistas que representan un 17% del capital». «Por el lado positivo, las cuentas de 2024 fueron aprobadas por lo que se cierra el riesgo de una suspensión de cotización por parte de la CNMV», señalan.
Las cuentas anuales de OHLA se han saldado con pérdidas en 2024. La compañía firmó unos números rojos de 49,9 millones de euros en los últimos doce meses, siendo el ajuste en la participación del proyecto Canalejas el principal lastre. El año pasado, la constructora registró un beneficio neto atribuible de 5,5 millones.
Con todo, OHLA «ha crecido en todas las principales magnitudes operativas de su cuenta de resultados» en comparación con el ejercicio 2023, según ha indicado en un comunicado. Incluyendo las cifras de la división (sin consolidar) de Servicios, el grupo cerró el año con unas ventas de 4.172,0 millones de euros, un avance del 16% respecto al año pasado y casi un 9% por encima de los estimado. De estos ingresos, 3.327,7 millones (+14,6%) corresponden al segmento de Construcción; 289,3 millones (+41,1%), al Industrial; y 34,9 millones (+47,3%), a otros conceptos.