La Fiscalía de Cantabria ha pedido, como media cautelar, que los cuatro menores investigados por acosar a un compañero del instituto Torres Quevedo de Santander, un estudiante con discapacidad, no puedan acercarse al menor a su domicilio, al centro educativo ni comunicarse con él.
En un escrito remitido a los medios de comunicación, la Fiscalía de Menores de Cantabria señala que investiga este caso como posible delito de lesiones o maltrato de obra y de discriminación.
Los hechos fueron denunciados alrededor de la segunda semana de marzo por la familia de la víctima, que señaló que cuatro compañeros le acosaban en el instituto donde comparte clase.
Concentración para pedir justicia
Decenas de personas permanecen concentradas a las puertas del instituto para pedir «justicia» para el alumno con discapacidad que ha sido víctima de acoso escolar, supuestamente por parte de cuatro compañeros, todos menores, a los que investiga la Fiscalía de Cantabria.
La concentración ha sido convocada a través de redes sociales y está encabezada por la familia del alumno que ha sufrido el acoso, que también se ha unido al acto, al igual que varios compañeros de su instituto, al acabar las clases este viernes.
La protesta ha comenzado pasadas las 13.30 horas, cuando se han abierto las puertas del instituto para que salieran los alumnos, lo que ha provocado que las personas que han acudido entraran al patio del centro, aunque posteriormente el acceso se ha cerrado y los concentrados permanecen junto a la puerta.
La madre, la prima y algunos familiares del menor que ha sido víctima de acoso han atendido a los periodistas y todos han coincidido en pedir «justicia» para este joven y que no se vuelvan a producir este tipo de situaciones.
En declaraciones a los periodistas, el consejero de Educación, Sergio Silva, ha señalado que su departamento estudia con las familias de los cuatro menores investigados por ese acoso la posibilidad de un cambio de centro.
Educación valora esa salida porque el procedimiento disciplinario que ha abierto está paralizado para no entorpecer la investigación de la fiscalía, según ha explicado Silva, quien ha subrayado que «la prioridad absoluta» es garantizar la seguridad del alumno que fue agredido en el instituto.
Agentes de la Policía Nacional estuvieron vigilando el centro este jueves después de que empezaran a circular por internet los datos personales de los agresores y hoy, viernes, también hay varias patrullas junto al instituto para evitar cualquier altercado.
