Al menos cinco bombarderos furtivos B-2 Spirit llegaron sin anuncio previo a Diego García, según rastreos de aviación y sin confirmación oficial del Pentágono.
Rastreos de vuelo revelan tránsito de varios B-2 hacia el Índico
El 24 de marzo de 2025, entusiastas de la aviación detectaron el tránsito de varios bombarderos B-2 Spirit mediante comunicaciones de tráfico aéreo, pese a que estos aviones no emiten señales visibles en los sistemas de rastreo como Flightradar24. Indicativos como PITCH 11, 12, 13 y 14 revelaron que cuatro B-2 se encontraban en vuelo.
Uno de los aviones, PITCH 13, declaró una emergencia y aterrizó en la Base Conjunta Pearl Harbor-Hickam. Los otros tres continuaron rumbo hacia el océano Índico, contactando al Centro de Control de Brisbane durante su trayecto.
Previo a este movimiento, cuatro KC-135 Stratotankers con los indicativos BUZZ 31 al 34 fueron desplegados desde Guam hacia la Base RAAF en Amberley el 23 de marzo, lo que indicó preparación para reabastecimiento en vuelo.
Posteriormente, otro grupo de B-2 con indicativos ABBA 11 y 12 partió desde la costa oeste de Estados Unidos hacia Diego García. A medida que los aviones se acercan a este territorio británico remoto, el seguimiento en línea deja de ser posible, lo que dificulta confirmar el número exacto de aeronaves que aterrizaron.

Detalles confirmados del despliegue secreto de B-2 a Diego García
- Al menos cinco B-2 Spirit habrían llegado a Diego García, según rastreo no oficial.
- Un B-2 fue desviado a Hawái por emergencia durante el tránsito inicial.
- Los bombarderos fueron apoyados por cisternas KC-135 desde Guam hacia Australia.
- NOTAM vigente restringe dos zonas del aeródromo hasta el 1 de mayo de 2025.
- Cuatro hangares B2SS están disponibles para albergar estas aeronaves en la base.
Ausencia de declaraciones oficiales sobre la operación aérea
A diferencia de despliegues anteriores de Misiones de Poder Global, este movimiento de B-2 no fue acompañado de comunicados ni imágenes por parte de la Fuerza Aérea de EE. UU., lo cual resulta inusual dada la magnitud del despliegue. En operaciones regulares, la USAF rara vez utiliza más de tres B-2 simultáneamente.
Un portavoz de la Fuerza Aérea confirmó únicamente que un bombardero B-2 aterrizó en Pearl Harbor-Hickam, pero no se ha emitido ningún comentario oficial sobre la llegada de unidades a Diego García ni su propósito estratégico.
Paralelamente, transportes militares C-17A Globemaster III han viajado a Diego García a través de bases en Alemania, Catar y Estados Unidos. Algunas salidas se originaron en Whiteman AFB, sede principal de los B-2, lo que sugiere envío de equipos y personal de apoyo.

Un NOTAM emitido el 25 de marzo indica que dos áreas del aeródromo estarán fuera de uso hasta el 1 de mayo. Aunque no se ha vinculado oficialmente con el despliegue, este dato podría ofrecer pistas sobre la duración prevista de la misión.
Instalaciones preparadas para recibir aeronaves de tecnología furtiva
La base de Diego García cuenta con cuatro hangares B2SS capaces de albergar individualmente cada bombardero. Estas estructuras, transportables y climatizadas, protegen la capa absorbente de radar de los B-2 y son únicas en el mundo, tras el retiro del hangar similar en RAF Fairford.
Los hangares tipo concha pueden ensamblarse en unos 70 días. Aunque la base británica aún mantiene hangares permanentes para B-2, los modelos móviles solo se usan en Diego García, lo que refuerza su rol estratégico en despliegues a largo plazo.
Si cinco bombarderos aterrizaron en la isla, como sugieren los datos disponibles, uno podría quedar fuera de hangar, lo que permitiría su identificación por imágenes satelitales en los próximos días.
Las capacidades sigilosas del B-2, junto con la naturaleza remota de la base, convierten a Diego García en un punto estratégico para operaciones que requieran alcance y discreción simultáneos.
Implicaciones estratégicas ante tensiones regionales con Irán

La ausencia de confirmación oficial ha generado especulaciones sobre un posible uso anticipado de estos aviones en eventuales operaciones contra Irán. Aunque EE. UU. sigue ejecutando ataques aéreos contra los hutíes en Yemen, estos no justifican una concentración tan elevada de B-2.
En el pasado, los B-2 volaron desde Whiteman para atacar objetivos hutíes, sin necesidad de desplazarse al Índico. Irán, sin embargo, representa un blanco con mayores capacidades defensivas, lo que podría justificar este despliegue avanzado.
Actualmente, el B-2 es el único avión autorizado para portar el GBU-57 Massive Ordnance Penetrator, un arma de 30.000 libras diseñada para destruir infraestructuras profundamente enterradas, como instalaciones nucleares.
Además del movimiento de B-2, EE. UU. ha reforzado sus posiciones en Oriente Medio con rotaciones de F-35 y la presencia esperada de dos grupos de ataque de portaaviones. Esta acumulación militar sugiere preparación para múltiples escenarios posibles en la región.
La entrada EE. UU. despliega en secreto bombarderos B-2 Spirit se publicó primero en Noticias de Israel.