Todos los partidos políticos están de acuerdo en extinguir las galeras de caballos en Palma. El consenso en el Ayuntamiento llega después de un largo periodo de debate y discrepancias sobre cómo llevar a cabo esta transición, si bien los grupos municipales de Vox y Més per Palma llevarán al próximo pleno sendas mociones para eliminar este servicio.
«Hemos reconsiderado nuestra posición por el propio gremio», ha admitir el líder de Vox en Palma, Fulgencio Coll, que ha reconocido haber cambiado de postura sobre las galeras porque los propios caleseros «quieren cambiar». La propuesta de Vox, que ha recibido el apoyo de todo el pleno (la moción de Més ha tenido un voto en contra, el del PP, pese a ser muy similar), subraya las dificultades del sector, como las normastivas de protección animal cada vez más restrictivas, presión de las entidades animalistas, restricciones por las alertas climáticas y los problemas de rentabilidad económica.
Proponen buscar urgentemente alternativas laborales viables para los conductores de las calesas e insisten en la necesidad de «encontrar una solución digna tanto para los caleseros como para los animales».
Por su parte, Més per Palma, que solo ha tenido el voto en contra del Partido Popular, ha planteado crear una mesa de diálogo formada por los trabajadores de las propias galeras, partidos políticos y entidades animalistas para gestionar la transición.
También piden la sustitución inmediata de las galeras tradicionales por vehículos eléctricos, la reconversión de las licencias en taxis y un plan para garantizar una jubilación adecuada y digna para los caballos afectados.
La líder de Podemos, Lucía Muñoz, ha recordado que PP y Vox al llegar esta legislatura frenaron una propuesta para cambiar las galeras de tracción animal a eléctricas con el presupuesto del Gobierno, una cuestión que por aquel entonces ya tenía el apoyo de la izquierda.
