A diferencia de marzo de 2024, en la asamblea fundacional de Sumar que aupó a Yolanda Díaz como líder, ahora los magentas llegan fortalecidos en lo que al debate público se refiere. Con un perfil más propio a explotar. También alentados por el crecimiento sutil en el último barómetro del CIS. Mientras que el año pasado la amnistía copó la agenda política y situó en el centro la confrontación entre el PSOE y el PP, ahora las dos cuestiones más relevantes pasan por su mano. Se trata del debate sobre la tributación del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y sobre el aumento del gasto en Defensa, que divide a socialistas y magentas. La confluencia de izquierdas quiere sacar rédito de ello y afianzar o recuperar a un votante que en los últimos meses podría haber priorizado a Podemos o al PSOE.
Con estos dos asuntos tendrá que lidiar la nueva dirección elegida por Sumar, que oficializará el relevo prorrogado de Díaz. Se apunta a que, como ahora, el liderazgo se asumirá de forma colegiada, como en la actualidad, tras remarcarse el perfil de Lara Hernández, secretaria de Organización, o del propio portavoz y ministro de Cultura, Ernest Urtasun. Por ahora se sabe que el domingo 30, tras un sábado dedicado al debate del documento político y las enmiendas, se darán a conocer las caras del nuevo proyecto. Actualmente, y tras la renuncia en junio de Díaz por los malos resultados electorales del último ciclo, la dirección la llevan el diputado Txema Guijarro, Hernández, Elisabeth Duval, secretaria de Comunicación, y Rosa Martínez, secretaria de Estado de Derechos Sociales.
Habrá enmiendas llamativas, se garantiza desde la actual dirección, lo que diferenciará todo «de la asamblea de Villaverde». «También todo llega más ordenado«. Y «ocurre lo mismo con las delegaciones territoriales», más afianzadas. Asimismo, participarán delegaciones internacionales de socios del espacio, aunque no se precisa quiénes. Se apunta a formaciones ecologistas integradas en Los Verdes o ligadas a The Left. Falta por conocer el sitio elegido. Será en Madrid, aunque no se descarta ‘sacar’ el evento fuera de la capital. Se espera movilización de la izquierda, aunque coincide con las fiestas del Partido Comunista de Andalucía.
La fecha de la asamblea, prevista para mediados de diciembre, tuvo que moverse a marzo por el colapso interno que generó el ‘caso Errejón’, tras varias denuncias anónimas y la de Elisa Mouliaá, pública, por acoso sexual por parte del entonces portavoz. Además, Íñigo Errejón era el responsable de la supervisión del documento político que ahora se avalará. Se espera la inclusión de enmiendas sobre Defensa, aunque se descarta nada relacionado con la salida de la OTAN. Habrá claro respaldo a cuestiones como la reducción de la jornada laboral o la protección del SMI.
Choque con Hacienda por el SMI
La división con los socialistas en la materia defensiva y sobre la tributación del SMI permite a los de Díaz, que se consolida como la líder política e implanta una bicefalia no reconocida, defender su gestión y la necesidad de que exista una alternativa a la izquierda del PSOE. En lo que se lleva transcurrido de legislatura, fuentes magentas vienen aquejando que el PSOE acaba capitalizando el rédito de las «políticas valientes» que en solitario «no se atrevería a hacer«. Lo ejemplifican ahora con cuestiones como la reducción de la jornada laboral, en la que se identifican como «empuje» del PSOE.
De cara al enfrentamiento con el SMI Sumar está dispuesto a saltarse uno de sus principios manifestados en conversaciones informales con los periodistas: «Nunca votar nada con el PP aunque estemos de acuerdo». Así se referían dentro del Grupo a una iniciativa que este jueves rechazará Sumar sobre Ucrania, pese a estar de acuerdo en algunos puntos. Acreditado ya que el Gobierno vetará la reforma propuesta por Sumar para aumentar la exención de tributación de IRPF, Sumar está por la labor de apoyarse en los populares para levantar ese veto desde la Mesa del Congreso el próximo martes si no se negocia. Algo que tensará más la coalición en el periodo de tramitación que se abrirá posteriormente.
Sumar refuerza su argumento de condicionante de las políticas sociales dentro del Gobierno con un último órdago lanzado por los magentas: reprochan al PSOE que en Euskadi, en las Juntas Generales, el PSE haya pactado la semana pasada con el PNV y Podemos Euskadi aumentar a los 20.000 euros el mínimo exento de pagar el IRPF a partir de 2026. Ello descoloca a los socialistas, que prevén ahorrar entre 1.700 y 2.000 millones de euros al no eximir de tributación el SMI. El aumento de 50 euros, hasta los 1.184 brutos mensuales al mes, hace sobrepasar el mínimo de 15.876 exentos hasta el momento. El enfrentamiento «no es bonito», acreditan fuentes de Sumar, pero están dispuestas a llegar «hasta donde haga falta para garantizar la justicia fiscal en España».
Defensa: exigencia de votar en el Congreso
Como se evidenció el martes en el Congreso, Sumar y el resto de socios de la izquierda volverán a reflejar este jueves las diferencias que les separan de los socialistas en materia de Defensa. Se votarán las dos propuestas debatidas en el pleno de hace dos días: una del PP para afianzar una postura de país y del Gobierno en torno al apoyo a Ucrania y a la OTAN y sus compromisos. Y otra del BNG de condena a la actitud de Trump pero que pone sobre la mesa salir de la Alianza Atlántica. A favor de la primera estarán los populares junto al PSOE, lo que acredita que salgan la mayoría de sus puntos. Caerá la segunda, sobre la que Sumar está dispuesta a apoyar esa salida de la OTAN aunque si se acepta una enmienda que matiza el argumento y lo liga a la constitución de una alternativa de defensa europea.
Sumar es crítico con la postura del PSOE, aunque es de los más laxos a diferencia del Bloque, Podemos o EH Bildu. La negativa de invertir más en defensa, para alcanzar el compromiso del 2% del PIB con la OTAN los iguala a todos. Se rechaza incrementarlo en lo que a lo que armamento se refiere, y no si se destina a fortalecer cuestiones como la ciberseguridad. Frente al modelo de carrera armamentística, Sumar defiende que Europa, que cuenta ya con dos tercios de armamento más que Rusia y el mismo aproximadamente que China, se dedique a distribuir mejor los recursos con los que cuenta.
Aún sin nada claro sobre la mesa, y a la espera de que se debata el asunto en el Consejo Europeo de esta semana, Sumar insiste en una condición crucial para todos los grupos y el PP: que haya un debate profundo sobre el modelo de defensa para que lo conozcan los ciudadanos. Sumar niega, de hecho, que haya habido presiones por parte del PSOE para no demandarlo. «¿Hay que potenciar la inversión en cazas Eurofighters, o en fragatas?«, se preguntan los magentas. «Que vaya a la Cámara, hay que debatir para saber qué modelo requiere España y cuál demanda Europa«, insisten. «Que lo voten los 350 diputados es lo más democrático», añaden.
Por el momento, los magentas se vanaglorian de haber logrado que el PSOE «recapacite» y «distinga» entre la inversión en defensa, que puede ir alineado con esa seguridad, y la compra de armamento militar. «Esperamos que se actúe en esa línea, pero es necesario el debate». Si el PSOE, ligado a la cumbre de la OTAN, quiere ampararse en ella para sacar adelante cualquier propuesta en Defensa, los magentas creen que será un antes y un después en la legislatura. Por perdida la dan ya en Podemos, quienes ven a Sánchez alineado con el PP y el belicismo «de la derecha».