Donald Trump cumple este jueves dos meses al frente del Gobierno de Estados Unidos, ocho semanas en las que se ha entregado a una frenética carrera de medidas y golpes de efecto con los que busca marcar una época no solo en su país, sino también en gran parte del resto del mundo.
Con la cámara baja y el Senado bajo el control de los republicanos, los pronósticos que auguraban un inicio de mandato agitado se han cumplido. Desde el 20 de enero, el presidente de EEUU ha ido apuntando con sus decisiones en política económica, social o diplomática a gran parte las obsesiones y mantras que configuran su discurso y que se han materializado en una ofensiva contra la inmigración, el desmantelamiento de ayudas sociales, la supresión de las políticas de género y de diversidad, la imposición de aranceles o el unilateralismo en política internacional.
Para ello, Trump ha recurrido sin reparo a las órdenes ejecutivas, que le permiten saltarse el trámite del Congreso. Pero además, el presidente de EEUU ha acompañado esas medidas de un buen número de controvertidas propuestas y declaraciones de intenciones.
Estas han sido algunas de las polémicas que han jalonado su convulsa agenda en sus dos primeros meses en la Casa Blanca:
Lucha contra la inmigración
En su cruzada contra la inmigración, Trump declaró la ‘emergencia nacional’ en la frontera con México, lo que autorizó el uso de militares, y puso en práctica una política de deportaciones de inmigrantes sin papeles, que le llevó incluso a utilizar temporalmente la base de la Marina de EEUU en Guantánamo (Cuba).
Indultos a los condenados por el asalto al Capitolio de 2021
El Gobierno de Trump indultó a la mayoría de las personas -unas 1.500- que fueron condenadas por el asalto al Capitolio de EEUU del 6 de enero de 2021. El propio Trump estaba siendo investigado por el caso, que dejó cinco muertos, pero su regreso al poder paralizó el proceso judicial.
Derogar las políticas de género y diversidad
La administración de Trump ha derogado gran parte de las medidas vigentes tras el mandato de Joe Biden sobre políticas de género y diversidad. En su discurso de investidura, ya había proclamado que sólo reconocería dos identidades de género: «El masculino y el femenino».
Recortes de gasto público
Con la idea de reducir el déficit federal, Trump ha impulsado una política de recortes para la que se ha apoyado en Elon Musk, quien se ha hecho cargo del llamado Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE). El plan se ha concretado en el desmantelamiento de facto de la Agencia de Cooperación y Desarrollo (USAID) y en despidos en diferentes órganos de servicios públicos federales.
Imposición de aranceles
Bajo la idea de que todo el mundo se ha aprovechado de EEUU en sus relaciones comerciales, Trump se ha erigido desde el primer momento en el adalid de una política proteccionista de aranceles sobre países y sectores concretos. Las decisiones en esta nueva guerra comercial se han sucedido espasmódicamente, en ocasiones de forma contradictoria, pero apuntan ya a una reconfiguración del comercio mundial.
Gaza, del «infierno» a la ideal del desplazamiento de palestinos y el ‘resort’ turístico
Las propuestas del dirigente republicano sobre Gaza ejemplifican su forma de hacer política. Respecto al conflicto en la Franja, Trump ha presumido de haber favorecido la tregua entre Israel y Hamás, ha amenazado con desatar un «infierno» si Hamás no liberaba a los rehenes y ha sugerido que EEUU podría tomar el control del enclave, deportar a sus habitantes e incluso crear sobre su suelo un ‘resort’ turístico de lujo, según reflejaba un vídeo de inteligencia artificial que publicó en las redes sociales.
Ucrania y el bochorno de la visita de Zelenski a la Casa Blanca
La idea de Trump de buscar una paz rápida en Ucrania le ha lanzado a presionar a Kiev, acercarse a Rusia y arrinconar a Europa. Su estrategia chocó ruidosamente con la postura de Volodímir Zelenski en la insólita rueda de prensa del Despacho Oval en la que el líder ucraniano acabó abroncado por el presidente de EEUU y su vicepresidente, J.D. Vance, quienes le amenazaron, además, con retirar la ayuda militar.
Forzar a Europa a elevar su gasto en defensa
En su anterior mandato, Trump insistió en la exigencia de que sus socios europeos de la OTAN elevasen el gasto en defensa. Sus presiones y, sobre todo, su decisión de amenazar con retirar la asistencia militar a Ucrania han forzado a Europa a convencerse de la necesidad de un aumento de sus aportaciones.
Renombrar el Golfo de México como Golfo de América
La batalla retórica también tiene importancia para Trump, que dejó un ejemplo de esa filosofía al decretar que el Golfo de México fuese renombrado como Golfo de América, en la medida que corresponde a las administraciones de EEUU.
Groenlandia, el Canal de Panamá y Canadá
El presidente de EEUU ha expresado sin tapujos una vocación expansionista que se ha fijado especialmente en tres objetivos: Groenlandia, el Canal de Panamá y Canadá.
Respecto a la isla, territorio autónomo de Dinamarca, el mandatario estadounidense ha alimentado la idea de una hipotética anexión, asegurando que se trata de una iniciativa necesaria por «seguridad nacional e internacional». Además, ha reiterado la idea de «recuperar» el mando del Canal de Panamá, una infraestructura que, según él, está controlando China, «violando» los tratados internacionales. Sobre Canadá, país al que ha descrito como el «estado 51», ha repetido que estaría mejor integrado en EEUU. Este mismo mes, Trump aseguró que a ambas naciones las separa «una línea artificial que parece haber sido trazada con una regla».
Retirar a EEUU del Acuerdo de París y de la Organización Mundial de la Salud
Entre sus primeras órdenes, Trump decidió la salida de EEUU de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y del Acuerdo climático de París, una decisión que flirtea de nuevo con las posiciones negacionistas que habitualmente han rodeado su discurso político.