El consejo de administración de Sareb, controlado por el Ministerio de Economía a través del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria, ha instado al ‘banco malo’ a iniciar una negociación con la entidad estatal de suelo Sepes, compañía dependiente del Ministerio de Vivienda y Agenda y llamada a ser la nueva empresa pública de vivienda del Gobierno, para traspasar todas las casas propiedad de la entidad, una medida que forma parte de la batería de anuncios que hizo el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en enero.
Tal y como ha informado Sareb en un comunicado enviado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la junta de accionistas celebrada este jueves ha acordado instruir al la entidad para que, «en coordinación con Sepes y con los departamentos ministeriales competentes, trabaje en las alternativas que permitan a Sareb colaborar en la generación del parque estatal de vivienda de alquiler social o asequible». En la práctica esto supone el traspaso de todos sus inmuebles residenciales.
Estas conversaciones se iniciarán el próximo 21 de marzo de 2025 y se demorarán hasta la celebración de la próxima junta de accionistas en la que se deberá presentar el acuerdo de colaboración o antes del 30 de junio de este mismo año. Mientras tanto, Sareb tendrá «temporalmente» paralizada la comercialización y venta «de todos los activos inmobiliarios susceptibles de formar parte del parque estatal de viviendas de alquiler asequible y social». La paralización incluye las casas, pero también los suelos y los préstamos impagados con colateral residencial.
Negociaciones en marcha
El objetivo último del Ministerio de Vivienda es que Sepes acabe recibiendo todas las viviendas o suelos residenciales en manos de Sareb, con el objetivo de incrementar el parque público bajo el paraguas de la entidad estatal. La transferencia de todos estos activos será paulatina y se demorará en los próximos meses, aunque el objetivo es que esté culminada antes de 2027, año en el que, si el Gobierno no lo cambia, el ‘banco malo’ debe disolverse.
En las diferencias transferencias se incluirán las casas ya vacías y listas para alojar inquilinos. Algunas, las que están en peor estado, Sareb acometerá antes reformas de acondicionamiento. Después, en una segunda o tercera fase, Sepes recibirá los suelos de Árqura Homes, promotora de Sareb cuya venta se paralizó hace solo unos meses, además de otros terrenos, como los contemplados en el Plan Viena, un programa de colaboración público-privada que acabó en fracaso.