El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha sugerido que su firme postura contra la inmigración pudo haber sido clave en su «abrumadora» victoria electoral, y ha aprovechado la ocasión para criticar al juez federal que intentó detener el vuelo de deportación de miembros del Tren de Aragua y la Mara Salvatrucha hacia El Salvador.
«Solo hago lo que los votantes querían que hiciera. Este juez, como muchos otros jueces corruptos con los que me encuentro, debería ser destituido», ha expresado Trump en una publicación en Truth Social, su propia red social. Aunque no ha mencionado explícitamente al juez al que se refiere, parece aludir al magistrado James Boasberg.
Trump continuó arremetiendo contra el juez, describiéndolo como un «lunático de la izquierda radical, alborotador y agitador tristemente nombrado por (el expresidente) Barack Hussein Obama, no fue elegido presidente». Ha aprovechado para recordar su victoria en las elecciones presidenciales de noviembre, en las obtuvo un segundo mandato centrado en políticas migratorias duras.
Poco después, el presidente del Tribunal Supremo de Estados Unidos, John Roberts, ha emitido una inusual declaración en respuesta a Trump, condenando sus comentarios sobre el magistrado Boasberg y recordando que el ‘impeachment’ no es el medio adecuado para desafiar decisiones judiciales con las que no se esté de acuerdo.
«Durante más de dos siglos, se ha establecido que el impeachment no es una respuesta adecuada al desacuerdo sobre una decisión judicial. El proceso normal de revisión de apelaciones existe para este propósito», ha expresado Roberts en un comunicado.
Esta no es la primera vez que Roberts, quien fue nombrado para el Supremo en 2005 por el expresidente George W. Bush, se enfrenta a Trump. En 2018, durante el primer mandato de Trump, Roberts ya había criticado al presidente por sus comentarios sobre un «juez de Obama» que falló en contra de su Administración, subrayando que en Estados Unidos no existen «jueces de Obama ni de Trump, ni de Bush ni de Clinton», sino un grupo extraordinario de jueces dedicados que hacen todo lo posible para que quienes comparecen ante ellos tengan los mismos derechos».
La prensa estadounidense ha recordado que, aunque Roberts ha votado en ocasiones contra los intereses de Trump en decisiones del Supremo, también fue el autor del fallo que determinó que Trump gozaba de inmunidad presidencial por sus intentos de revertir los resultados de las elecciones de 2020.
El sábado, la Administración Trump envió a cerca de 250 presuntos delincuentes extranjeros hacia El Salvador, amparándose en una ley del siglo XVIII que otorga poderes especiales al presidente en tiempos de guerra para deportar a ciertas nacionalidades.
El magistrado Boasberg intentó bloquear estas deportaciones, pero la orden llegó tarde, ya que el avión con los presuntos miembros del Tren de Aragua y la Mara Salvatrucha ya había partido hacia El Salvador. La situación generó burlas en la Administración Trump y en el presidente salvadoreño Nayib Bukele, quien bromeó diciendo que la orden judicial llegó «demasiado tarde».