La Unión Europea ha hecho caso omiso de las amenazas del presidente de EEUU, Donald Trump, y ha advertido abiertamente a Google y Apple por su incumplimiento de la ley de mercados digitales europea. Google, propiedad de Alphabet, y Apple se enfrentan a multas millonarias. La UE acusa a Google de favorecer servicios internos en su extenso imperio de búsqueda y por impedir que los desarrolladores de aplicaciones dirijan a los consumidores a ofertas fuera de su mercado de aplicaciones (Play Store). La UE también insta a Apple a establecer puentes entre el sistema operativo del iPhone y Android para cumplir con las normativas antimonopolio. El cerco a las tecnológicas estadounidenses se produce en plena batalla arancelaria y las quejas de Trump por la reglamentación e impuestos aplicados por la UE a las empresas.
En el caso de Google, el envío a la compañía de las primeras acusaciones abre un plazo para que Alphabet pueda presentar alegatos escritos en su defensa pero, de confirmarse en el curso de la investigación los incumplimientos, el Ejecutivo comunitario podrá imponer una multa de hasta un 10% de su volumen de negocio.
Las reglas de la UE
La vicepresidenta de la Comisión Europea encargada de Competencia, Teresa Ribera, ha explicado en un comunicado que el envío de las acusaciones a Alphabet busca garantizar que dos servicios «ampliamente utilizados por empresas y consumidores europeos» como son Google Search y los teléfonos de Android están alineados con las reglas de la Unión. Así, Ribera ha explicado que la investigación preliminar apunta que la compañía norteamericana favorece a sus propios productos en los resultados de búsquedas realizadas desde la plataforma de Google «lo que significa que proveedores y competidores no se benefician de una clasificación justa».
Entre sistemas
También ha aclarado que la segunda parte de las acusaciones contra Alphabet responde a que los servicios comunitarios consideran que pone trabas a que los usuarios de Android puedan ser informados o redirigidos a ofertas más baratas de desarrolladores que no están en la plataforma de Google Play. Por ejemplo, el regulador ha expuesto el caso de Google Shopping o la búsqueda de hoteles y vuelos en sus páginas de resultados, donde asegura que el buscador se beneficia de su posición dominante ya que más del 90% de las consultas en Internet en la UE se hacen a través de esa plataforma.
Orientaciones legalmente vinculantes
En el caso de Apple, el Ejecutivo comunitario remite a la compañía unas directrices para asegurarse de que cumple con el marco normativo europeo en materia de interoperabilidad sin que por el momento suponga una «evaluación de cumplimiento» de la norma, si bien estas orientaciones son legalmente vinculantes para el gigante tecnológico. Bruselas considera que la interoperabilidad permite una integración «más profunda y fluida» de los productos de terceros con el ecosistema de Apple, por lo que resulta «clave para abrir nuevas posibilidades» a otros desarrolladores y servicios innovadores y que los europeos dispongan de una mayor variedad de productos compatibles con los dispositivos de la compañía.
Funciones de conectividad
Los cambios deben aplicarse, por un lado, a nueve funciones de conectividad de iOS que se encuentran principalmente en smartphones, auriculares o televisores para que otras marcas tengan mejor acceso a las funciones de iPhone que interactúan con sus dispositivos (por ejemplo notificaciones en pantalla), una transferencia de datos más rápida y una configuración más sencilla, por ejemplo, a la hora de emparejar dispositivos. Entre las exigencias del regulador está facilitar las conexiones WiFi y Bluetooth de forma automática.
Documentación técnica
Por otro lado, las modificaciones que reclama Bruselas deberán mejorar la «transparencia y eficacia» del proceso que Apple aplica a terceros interesados en obtener interoperabilidad con las funciones de iPhone y de iPad, por ejemplo mediante un mejor acceso a la documentación técnica sobre funciones y actualizaciones.
Multas
En los últimos años, Google, con sede en Mountain View (California), se ha enfrentado a un creciente escrutinio de la UE por su negocio de búsquedas. El año pasado perdió un recurso judicial para anular una multa récord de 2.400 millones de euros por abusar de su poder de monopolio para imponerse sobre a los servicios rivales de búsqueda de compras. Apple había advertido anteriormente de los intentos de la UE de abrir los sistemas operativos del iPhone e iPad, acusando a su rival Meta Platforms Inc. de intentar acceder a sus funciones sensibles en una medida que suscita «preocupación por la privacidad y seguridad de los usuarios».