El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía ha confirmado la condena a seis años y un día de prisión para una acusada de recibir 1,8 kilogramos de heroína en un comercio de Puente Genil. Según consta en el relato de los hechos considerados probados por el tribunal, la droga le fue entregada por un guardia civil disfrazado de mensajero, después de que el Instituto armado fuese alertado por las autoridades de Alemania del envío.
La procesada recurrió el fallo de la sección segunda de la Audiencia provincial de Córdoba, alegando que aceptó el paquete sin realizar más comprobaciones porque esa misma mañana esperaba un envío de Valencia. Sin embargo, el TSJA ha desestimado el recurso y recuerda que la Audiencia creyó acreditada su culpabilidad. Así, la encartada era la destinataria del paquete, ya que en este, según detalla la sentencia, aparecía la dirección correcta del establecimiento comercial que regentaba y el nombre que figuraba no era el suyo real, sino el que usa en sus relaciones privadas.
«Además, la sentencia incide en que no es lógico que alguien se arriesgue a enviar una mercancía tan valiosa a una persona a la que no conoce para que ésta la haga llegar posteriormente a un tercero», afirma el alto tribunal. De este modo, la sustancia intervenida fueron 1.777 gramos de heroína con una pureza del 47% y un valor en el mercado ilícito de 157.482 euros. El tribunal señala que «la droga iba a ser distribuida, con colaboración de la acusada, a terceras personas».
De Malawi a Puente Genil
La operación comenzó cuando el Servicio de Aduanas de Alemania informó, en mayo de 2021, al equipo de Delincuencia Organizada de la Guardia Civil de Córdoba de que había interceptado en el aeropuerto de Leizpig un paquete que contenía heroína y debía ser trasladado a Málaga para su posterior entrega en Puente Genil.
Las autoridades alemanas solicitaron la colaboración de las españolas a fin de comprobar la posible existencia de un delito contra la salud pública, tráfico de drogas que causan grave daño a la salud, y sus posibles implicados. El paquete fue trasladado al aeropuerto de Málaga por un funcionario policial alemán que hizo entrega del mismo al equipo de Delincuencia Organizada de la Guardia Civil de la Comandancia de Córdoba.
Este equipo, para agotar la investigación, solicitó del juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Puente Genil autorización de circulación vigilada y entrega controlada del referido paquete. La actuación policial ha finalizado con la condena de la acusada por tráfico de droga.
