El sector de la construcción empezó a recuperar el ritmo el año pasado y puso en el mercado un total de 97.837 viviendas nuevas, según los datos que ha hecho público este viernes el Ministerio de Transportes, a partir de los certificados de fin de obra que recogen los Colegios de Arquitectos Técnicos de toda España. En el mismo registro de datos, se constata que el año pasado se iniciaron 127.721 nuevas casas, de acuerdo con los visados expedidos. Las estadísticas, pese a mejorar notablemente las de los años anteriores, muestran que todavía queda camino por recorrer si se quiere dar respuesta a la alta demanda habitacional que hay en España, que necesita entre 600.000 y un millón de pisos nuevos, según el Ministerio de Vivienda.
Con todo, el Gobierno subraya este viernes el impulso que se ha dado en el último año, que, según afirma en un comunicado, «revierte la estadística negativa en la construcción de nuevas viviendas, ya que se finalizaron 10.000 viviendas y se iniciaron casi 20.000 más que en 2023«.
En concreto, en lo relativo a las certificaciones de fin de obra, es decir los pisos que se terminaron de construir, el año pasado fueron 10.272 viviendas más que en el ejercicio anterior, un 11,73% más. El dato contrasta, según Transportes, «con las variaciones negativas de los dos años anteriores: en 2023 se certificaron 1.542 viviendas menos que el año anterior y en 2022 se certificaron 2.283 viviendas menos que el año anterior».
Respecto a las obras que se iniciaron, la cifra de 127.721 nuevos pisos supone un total de 18.238 visados más que en el año anterior, un 16,66% más. Para el departamento que dirige el ministro Óscar Puente, «estos datos demuestran un cambio de tendencia en el incremento de oferta de vivienda, necesaria para reducir el déficit actual con el ritmo de creación de hogares».
Las últimas previsiones del Banco de España, actualizadas el pasado octubre, ponen de manifiesto, sin embargo, que ese ritmo debería acelerarse aún más, si se aspira a dar respuesta a la elevada demanda. Según este organismo, en 2024 y en 2025 deberían de estarse construyendo 225.000 viviendas nuevas para atender la creación neta de hogares prevista. El déficit previsto para estos dos años vendría a sumarse al de 365.000 unidades que se arrastra de 2022 y 2023 (casi 600.000 unidades en el conjunto de los cuatro años). Los territorios donde más urge actuar es en las comunidades de Catalunya, Madrid, Andalucía y Comunidad Valencia.