Han tenido que pasar 292 días para que Alfonso Pedraza vea finalmente la luz al final del túnel. El lateral cordobés, después de vivir un auténtico calvario con las lesiones que empezó en enero de 2024, vuelve a una convocatoria con todas las dolencias físicas siendo cosa del pasado, un refuerzo de lujo para el Villarreal en su camino al asalto de un billete para la próxima Champions.
No ha podido recibir mejor noticia Marcelino de cara a la previa del crucial partido contra el Rayo Vallecano de este sábado. Alfonso Pedraza, una de las piezas clave del conjunto groguet estas últimas temporadas, está de vuelta después de pasar por una odisea de 13 meses que está a punto de tocar a su fin.
Un calvario interminable
El calvario del cordobés inició en enero de 2024 tras recibir un fuerte golpe en su tobillo durante un entrenamiento. Pedraza tuvo que estar algo más de dos meses de baja, aunque su reaparición no terminó siendo como se esperaba; tras solamente cinco partidos disputados, el lateral volvió a recaer de su lesión obligándole a perderse el final de la pasada temporada. Las dolencias parecían no desaparecer con el paso de los meses, así que en noviembre el jugador decidió acudir a quirófano para ser sometido a una artroscopia y cirugía del tobillo por el reputado doctor Niek Van Dijk.
Los plazos empezaron a acortarse desde entonces; Pedraza empezó a acumular buenas sensaciones y en los últimos días se encontraba cerca de estar en las condiciones necesarias para entrar en el equipo. Ahora, el cordobés está de enhorabuena; su calvario ha llegado a su fin y su vuelta a los terrenos de juego podría producirse este mismo sábado contra el Rayo Vallecano.
Se trata de una noticia extraordinaria para Marcelino, que recupera a uno de los pilares del equipo. No por nada, Pedraza es junto a Gerard Moreno, Raúl Albiol y Dani Parejo el miembro de la plantilla con más partidos en el Villarreal. El conjunto groguet cuenta en su posición con un Sergi Cardona en estado pletórico, aunque desde el club cuentan con Pedraza para ofrecer liderazgo y madurez al equipo.
