“Que injusto, que injusto tío”, decía Alejandro Davidovich Fokina mirando a su ‘box’ en la final de Delray Beach. El serbio Miomir Kecmanovic le remontó el primer set, y el español llegó a desaprovechar dos bolas de partido en el tercero (3-6, 6-1, 7-5). Podía haber sido el 50º español de la historia en ganar un título de tenis, pero se quedó a la orilla en Estados Unidos de su primer trofeo ATP.
El malagueño arrancó de perlas el partido, rompiendo el saque y situándose 4-2 en la manga, pero que se le atragantó en el segundo set. En el tercero y definitivo, tuvo un 5-2 y 40-15 a favor que no pudo llegar a culminar, y el serbio, crecido, remató el trabajo para acabar ganando en el juego definitivo. Otra oportunidad desaprovechada. Era la segunda final de su carrera tras la que perdió en el 2022 contra el griego Stefanos Tsitsipas en el Masters 1.000 de Montecarlo.
Aun así,e sta parecía especial. En una versión mejorada de sí mismo en 2025, había pasado las rondas con soltura incluso eliminando al estadounidense Taylor Fritz, cuarto jugador del mundo y campeón en las dos últimas ediciones.
Nunca hasta ahora lo tuvo tan cerca el español, que disfruta de una notable mejoría en este 2025 y que en su recorrido en este torneo de categoría 500, en pista dura, había obtenido triunfos tan sonados como el conseguido contra el estadounidense Taylor Fritz, cuarto jugador del mundo y campeón en las dos últimas ediciones.
Con este título, Kecmanovic gana su segundo torneo ATP tras el de Kitzbühel (Austria) en 2020.