Esto empieza en nada, en el primer fin de semana del próximo mes de marzo, el circuito de Buriram, en Tailandia, donde ayer concluyeron los últimos entrenamientos invernales con un éxito arrollador de los hermanos Marc y Alez Márquez, será escenario del primer gran premio de la temporada de motociclismo, no solo de MotoGP, con dos carreras, el ‘sprint’ del sábado y la prueba larga del domingo.
Ducati ha vuelto a demostrar que no hay quien se acerque a sus prestaciones. Eso sí, las novedades que el equipo del gurú Gigi Dall’Igna ha ideado a lo largo del invierno no han agradado a sus dos pilotos, ‘Pecco’ Bagnaia y Marc Márquez, que han descartado, especialmente, el uso del nuevo motor de la ‘Desmosedici’ y, por tanto, los dos próximos años (2025 y 2026), seguirán compitiendo con el propulsor con el que fue campeón el madrileño Jorge Martín, en el equipo satélite de Prima Pramac.
Es evidente que la ‘Desmo’ 2024 ya es una moto lo suficientemente buena como que sea muy, muy, difícil mejorar. “Tenemos cosas nuevas, piezas nuevas que no puedo explicar, aerodinámica nueva, tenemos muchas cosas para mejorar la 24, pero en seguida nos dimos cuenta de que no podíamos asumir el riesgo de dar el OK al motor 25, que no nos parecía, en el global del examen, mejor que el 24”, señaló Márquez antes de abandonar Buriram, sensiblemente contento con los test invernales. “Eso sí, me fui más feliz de Malasia que de lo que me voy de Tailandia, pero hay algo que me tranquiliza mucho: hemos trabajado muy a gusto ‘Pecco’ y yo, empiezo a congeniar muchísimo con mi nuevo técnico (Marco Rigamonti) y la moto está lista para competir”.
Ducati ha sufrido el primer fracaso de los últimos años al tener que descartar, por petición de Bagnaia y Márquez, la utilización del motor 2025, al considerar sus pilotos que la versión del pasado año sigue siendo mejor que la nueva
Márquez, que en Sepang hizo un simulacro de carrera al ‘sprint’ que le hubiese convertido en el ganador del sábado, rechaza, por completo, su papel de favorito para el Gran Premio de Tailandia. “No, no soy el favorito. El favorito es Bagnaia. Yo, como mucho, soy el segundo favorito y, sí, por descontado que soy, debo serlo, estoy en Ducati oficial, uno de los aspirantes al título”. Y añadió: “La gran revelación de estos dos test, tanto en Malasia como en Tailandia, ha sido mi hermano Alex, que ha estado portentoso”.
MM93 agradece, por ejemplo, a Rigamonti que se haya pasado todo el invierno analizando los datos, la telemetría, de sus entrenamientos y carreras con la Ducati del 23, que pilotaba en el equipo Gresini Racing Team Ducati. “Cuando nos vimos el primero día, ya sabía todo lo que me gusta y todo lo que necesitaba y eso, la verdad, facilitó mucho el trabajo y, sobre todo, que nos acopláramos rápidamente”. En ese sentido, Márquez elogió que, en el seno del equipo Ducati, se trabaje de una forma especial. “En Sepang, tanto ‘Pecco’ como yo detectamos un pequeño problema y Gigi no dejó que avanzáramos hasta solucionarlo y eso me gustó mucho, sí”.
Alex Márquez (Ducati), en su último test en Tailandia. / ALEJANDRO CERESUELA
“No sé, yo le he visto muy fuerte, aunque no quiero opinar mucho, pero me ha parecido que le ha salido el tiempo cuando él ha querido pero, bueno, estamos pegaditos a él”, comentó su hermano Alex, primero en Barcelona, en noviembre del pasado año, primero en Malasia y segundo, en Tailandia. “No se puede pedir más ni mejor, desde luego, es para estar muy, muy, contento. Cuando he hecho el simulagro de GP he tenido un problema electrínico y un problema con la goma delantera pero he seguido adelante porque tampoco eran muy gordos”.
El ‘hermanísimo’ cree que el hecho de que los oficiales (Bagnaia, Marc y Fabio Digiannantonio) monten en sus Ducati el mismo motor que llevarán los otros tres pilotos privados de la firma de Borgo Panigale (él, Fermín Aldeguer y Franco Morbidelli) es bueno para ellos. “Es bueno porque, tal vez, no tengo ni idea, no tendrán ese plus que les podría proporcionar el nuevo propulsor y, además, porque será mucho más fiable y mejor para trabajar en la puesta a punto de cada uno que todos podamos comparar las telemetrías que, en ese sentido, partirán de la misma base”.
«Yo soy un recién llegado al equipo Ducati. Bagnaia lleva varios años peleando y consiguiendo el título, lo normal es que, en el primer GP de la temporada, el favorito sea él. Yo puedo ser el segundo favorito, pero no el primero. Y ¡ojo! con mi hermano Alex».
Eso sí, claro, Alex Márquez considera que las ventajas de estar en el equipo oficial de Ducati es mucho más que tener un motor mejor o de nueva generación. “Ellos tienen muchos más ingenieros, tienen la posibilidad de probar y añadir piezas nuevas, tienen una aerodinámica especial, bueno, no sé, esperemos que no la mejores mucho más”.
Cuando le preguntaron si se había asegurado que Ducati le diese el mismo motor que a su hermano Marc, ahora que ya han decidido retirar y guardar en el almacén el nuevo propulsor fallido de este año, el pequeño de los Márquez, doble campeón del mundo, detalle que muchos olvidan a menudo, lanzó una sonrisa enorme al aire y dijo “sí, sí, por supuesto que me he asegurado y, además, Gigi (Dall’Igna) siempre, siempre, se ha portado de maravilla con todos sus pilotos”.