- Pérdidas de 332 millones de euros en cítricos
- La amenaza de competidores extracomunitarios
- Recuperación lenta del campo tras la DANA
- Las ayudas tardan en llegar
La devastación que dejó la DANA en la Comunidad Valenciana en octubre no solo arrasó campos y caminos rurales, sino que ha tenido consecuencias inesperadas en el mercado de los cítricos. Pese a la pérdida de 300.000 toneladas de naranjas y mandarinas —un 10% de la producción autonómica— los precios en origen han caído un 15% respecto a la pasada campaña.
La Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja) y la citrícola Palmanaranja apuntan a una competencia descontrolada de fruta importada como uno de los principales factores de este desplome.
Pérdidas de 332 millones de euros en cítricos
Las fuertes lluvias y riadas dejaron campos anegados, árboles arrancados y cosechas inservibles. La producción citrícola valenciana se vio especialmente afectada, con pérdidas económicas que superan los 322 millones de euros solo en fruta pendiente de recolección.
A esto se suman los daños en infraestructuras agrarias, que elevan la factura total a 1.380 millones de euros, según estimaciones de las organizaciones agrarias.
A pesar de esta reducción drástica en la oferta, los precios de la variedad más común de naranja se sitúan actualmente en 0,30 euros el kilo, frente a los 0,36 euros del año pasado, según los datos proporcionados por la Asociación Valenciana de Agricultores (Ava-Asaja) a Confidencial Digital.
La entrada masiva de naranjas de Sudáfrica y Egipto ha presionado los precios a la baja, impidiendo que los agricultores españoles puedan compensar las pérdidas sufridas por la DANA.
Desde Palmanaranja y Asaja denuncian que las importaciones sudafricanas se han prolongado más allá de lo habitual, coincidiendo con la campaña española, en especial en el caso de la variedad salustiana. Además, alertan sobre la llegada inminente de naranjas egipcias, lo que podría agravar aún más la situación del sector.
Las organizaciones agrarias valencianas también han señalado la volatilidad del mercado, con un consumo errático y una demanda irregular. Mientras el año pasado los precios comenzaron altos y se fueron desplomando desde enero, en esta campaña han arrancado a la baja y se han mantenido en esos niveles.
Recuperación lenta del campo tras la DANA
La situación de los productores valencianos se agrava aún más por la lentitud en la recuperación del campo tras el desastre natural. Según las organizaciones agrarias, la mayoría de las infraestructuras agrícolas siguen en estado crítico.
«Los caminos rurales, acequias y canales de riego quedaron destrozados, pero la administración va a un ritmo muy lento. Se están priorizando algunas reparaciones, pero la realidad es que muchos agricultores siguen sin acceso a sus parcelas«, denuncian desde Ava-Asaja.
Las ayudas tardan en llegar
Las ayudas prometidas por la Generalitat y el Gobierno central tampoco han aliviado la crisis. Los autónomos agrícolas han recibido una ayuda de 5.000 euros, pero los pequeños productores a tiempo parcial han quedado fuera de las subvenciones. Además, las indemnizaciones más cuantiosas pueden tardar meses o incluso años en llegar.
Los agricultores valencianos reclaman medidas urgentes para frenar la competencia desleal de cítricos importados y acelerar las ayudas para la recuperación del campo. Consideran que si se permitiera a los propios afectados contratar maquinaria y presentar facturas, la reconstrucción sería mucho más rápida.
Por otro lado, el sector ganadero también ha sufrido pérdidas millonarias. La Conselleria de Agricultura estima que al menos 4.000 animales murieron a causa de las inundaciones, con una afectación de 23 millones de euros en el sector. Se han dado ayudas para la reposición de ganado y para la compra de piensos, pero muchas explotaciones han quedado en una situación muy delicada.
