El Gobierno de Cuba ha anunciado la suspensión total de la actividad docente y laboral «no imprescindible» durante este viernes y sábado por la grave crisis energética que sufre la isla y después de los apagones continuos que se registran en la isla en las últimas semanas.
«Teniendo en cuenta la situación energética que afronta el país y con el objetivo de contribuir al necesario ahorro en el consumo de energía eléctrica para atenuar las afectaciones a la población, se ha decidido suspender durante los próximos días 14 y 15 de febrero las actividades docentes y laborales que no sean imprescindibles en las condiciones actuales», ha anunciado la ministra de Trabajo y Seguridad Social, Marta Elena Feito Cabrera.
«Como es habitual en estos casos, se mantienen los servicios básicos a la población«, ha explicado en un comunicado publicado en redes sociales en el que ha afirmado que «los trabajadores que derivado de esta situación no asisten al trabajo recibirán una protección equivalente al salario escala del cargo que ocupan con lo establecido en el Código de Trabajo».
El país se encuentra sumido en una crisis energética desde hace años por la carencia de combustible -por la falta de divisas para importarlo- y por las frecuentes averías en sus obsoletas centrales termoeléctricas, con décadas de explotación y un déficit crónico de inversiones.
Esta crisis energética en Cuba se ha agravado en los últimos meses. En el último trimestre de 2024 se registraron tres apagones nacionales mientras que varias ciudades han sufrido estos días cortes eléctricos, con la capital, La Habana, programando, incluso, suspensiones del servicio durante varias horas.