Es casi una máxima: si hay derbi, hay polémica arbitral. Antes, durante o después, siempre irrumpe la figura del colegiado de turno asumiendo más focos de los que seguramente todas las partes, incluidos ellos mismos, desearían. Y más desde la llegada al banquillo del Atlético de Diego Pablo Simeone, en la que estos partidos han recuperado la trascendencia de antaño al volver a ser vitales en la lucha por los títulos con el resurgir del club rojiblanco.
Pero el de este sábado (Movistar LaLiga; 21.00) ha ido más allá. Desde que hace más de un mes, tras la polémica eliminación del Celta en el Bernabéu en la Copa Simeone dijo aquello de que «estas cosas llevan pasando más de 100 años», todo se ha ido calentando hasta alcanzar su apogeo con la sonora sobreactuación del Real Madrid tras la roja no señalada en la entrada de Carlos Romero a Mbappé en el duelo contra el Espanyol la semana pasada.
Un error evidente, sí, pero que ha provocado un aluvión de medidas, comunicado incluido en el que el club blanco acusa a los árbitros y a la competición de «manipulación y adulteración» y videos señalando a los árbitros en Real Madrid TV mediante, que han hecho que toda la previa del derbi gire casi en exclusiva alrededor de la figura de los colegiados. Y que han llevado al Atlético a responder, con ironía a través de sus redes sociales, señalando que lo que el Madrid busca es «influenciar» a Soto Grado para el partido del sábado, al que ambos llegan separados solo por un punto y jugándose el liderato.
26 duelos de Liga, y un balance a favor de los blancos
¿Pero que dicen los datos? Ciñéndonos solo a los partidos entre el Madrid y el Atlético, la realidad es que, ante la frialdad de la estadística, el club blanco no puede tener mucha queja, al menos a los que los derbis ligueros se refiere. De los 44 duelos capitalinos que se han jugado en la era Simeone, más de la mitad, 26, corresponden al campeonato liguero. Y en ellos, el saldo arbitral es muy favorable al Real Madrid, que sale ganando en todos los aspectos medibles.
Sin entrar a valorar cada acción ocurrida en 13 años de partidos de forma individual, los datos muestran que el club blanco ha recibido en el trascurso de este tiempo casi la mitad de tarjetas amarillas (57) que su vecino rojiblanco (98). El saldo actualmente se sitúa en un +41 a favor del Madrid, que ha recibido casi la mitad de amonestaciones que su rival capitalino en los duelos directos.Una tendencia que se mantiene en los otros apartados arbitrales medibles.
Por ejemplo, el Real Madrid no ha visto ninguna tarjeta roja en los duelos ligueros contra el Atlético en este mismo tiempo, mientras que los rojiblancos han sufrido cuatro expulsiones. Marcos Llorente y Ángel Correa, recientemente, y Thomas Partey y Mario Hermoso, en años previos, se fueron a vestuarios antes de tiempo. También es favorable al club blanco el saldo de penaltis durante este periodo, doblando en este caso a los rojiblancos. Cuatro han lanzado los jugadores madridistas, mientras que los del Atlético han visitado el punto de penalti en dos ocasiones.
Así las cosas, y con este balance, ambos llegan al derbi más caliente de los últimos tiempos en un ambiente cargado y casi irrespirable. Y en el que Soto Grado estará, seguramente sin quererlo en absoluto, tan observado como los grandes estrellas de los dos equipos.