Los científicos han conseguido obtener la evidencia más clara hasta la fecha en torno a que los simios pueden comprender cuándo cometemos un error o una omisión en una tarea e indicarnos nuestra falla con claridad. Es un gran avance en la comprensión de los mecanismos intuitivos y cooperativos en primates no humanos.
Investigadores del Grupo de Orígenes Sociales y Cognitivos de la Universidad Johns Hopkins, en Estados Unidos, han comprobado por primera vez que los simios comunican información desconocida en nombre del trabajo en equipo: le indican a una pareja humana si no ha completado correctamente una tarea asignada.
Según detallan en el nuevo estudio, publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), los científicos pudieron conseguir que con el propósito de obtener golosinas, los simios las señalaran con entusiasmo a los humanos que no sabían dónde estaban, un experimento aparentemente sencillo que sin embargo hizo posible un hallazgo clave.
Capacidades desconocidas
«La capacidad de percibir lagunas en el conocimiento de los demás es la base de nuestros comportamientos sociales más sofisticados, fundamental para la forma en que cooperamos, nos comunicamos y trabajamos juntos de forma estratégica. Como muchas de estas capacidades hacen únicos a los seres humanos, por ejemplo la enseñanza y el lenguaje, se cree que están ausentes en los animales no humanos», indicó en una nota de prensa Chris Krupenye, uno de los autores del estudio.
«Pero este trabajo demuestra los ricos cimientos mentales que comparten los humanos y otros simios, y sugiere que estas capacidades evolucionaron hace millones de años en nuestros antepasados comunes«, agregó Krupenye en el comunicado. Los experimentos se realizaron con el apoyo de Ape Initiative, una organización sin fines de lucro dedicada a la investigación y la educación, que aportó a los bonobos que participaron en las pruebas.
Durante las mismas, los bonobos se sentaban junto a los investigadores, observando cómo una segunda persona colocaba una golosina debajo de una de las tres tazas presentes en una mesa. En ocasiones, el investigador podía ver dónde iba la golosina, a veces no. El bonobo podía quedarse con la golosina si el científico lograba encontrarla: de esta forma, pudo comprobarse que los monos le indicaban a los investigadores la ubicación de la golosina, cuando su compañero humano no la conocía.
Complejidad mental
El trabajo científico reproduce en un entorno controlado hallazgos similares en la naturaleza, que sugieren que los chimpancés vocalizan para advertir a sus compañeros de grupo que ignoran amenazas potenciales, como por ejemplo una serpiente. Además, los resultados muestran que los simios pueden tener simultáneamente dos visiones del mundo en conflicto en su mente: conocen exactamente dónde está la comida y, al mismo tiempo, saben que la visión de su compañero sobre la misma situación carece de esa información.
Además de haber demostrado que los simios se comunican con una pareja para cambiar su comportamiento, los científicos buscarán comprobar en futuras investigaciones si los monos también señalan para cambiar el estado mental de su pareja o sus creencias.
Referencia
Bonobos point more for ignorant than knowledgeable social partners. Luke A. Townrow and Christopher Krupenye. PNAS (2025). DOI:https://doi.org/10.1073/pnas.2412450122