«Hemos visto en el día de hoy que ha dimitido, después de varios años cobrando, parece ser, sin ir a trabajar, un Sánchez Pérez-Castejón. Por algo se empieza. Creo que deberían seguir este camino el fiscal general del Estado [Álvaro García Ortiz], decenas de altos cargos del Gobierno socialista imputadas en las tramas de corrupción, incluyendo al 1″, ha declarado Alberto Núñez Feijóo refiriéndose a Pedro Sánchez.
El líder del PP se ha hecho eco así de la noticia conocida este miércoles de que el hermano del presidente del Gobierno, David Sánchez Pérez-Castejón, había presentado su renuncia de forma unilateral como jefe de la Oficina de Artes Escénicas de la Diputación de Badajoz. El hermano está investigado por el Juzgado de Instrucción número 3 de Badajoz por su contratación en esa institución y delitos contra la Administración Pública y la Hacienda Pública, prevaricación, tráfico de influencias y malversación. Según el Gobierno de coalición, esta salida se debe a la «campaña de fango» que ha sufrido desde ámbitos de la ultraderecha. «Los tribunales terminarán dándole razón a lo que hemos dicho siempre, que esto es un bulo, una mentira que terminará en nada, pero que mientras tanto hace sufrir a personas particulares», ha dicho la vicepresidenta y ministra de Hacienda, María Jesús Montero.
Para el jefe de la oposición, «España necesita soluciones, no sumarios judiciales, necesita políticos limpios, no que se sienten en los banquillos ante los juzgados. Necesita un presidente del Gobierno libre de sospecha y no cercado por casos directos de corrucpión». Feijóo se ha referido a las investigaciones judiciales del fiscal general (por una supuesta filtración de datos personales del novio de Isabel Díaz Ayuso, presunto defraudador de Hacienda), al exministro José Luis Ábalos (por presuntas comisiones) y a la esposa de Sánchez, Begoña Gómez (por sus negocios privados).