El comercio minorista en La Rioja cerró 2024 con una nota positiva. En Diciembre, un mes clave por la campaña navideña, reflejó un incremento del 2,8% en las ventas en la comunidad riojana, aunque ligeramente por debajo del 3,5% registrado en el conjunto de España. A pesar de esta diferencia, el dato confirma la tendencia positiva que se ha mantenido desde julio, cuando el sector comenzó a registrar tasas interanuales de crecimiento.
Los comerciantes riojanos, sin embargo, siguen con cautela este repunte, conscientes de que factores como el coste de la energía, la presión fiscal y la competencia del comercio online continúan condicionando el crecimiento.
incertidumbre en el comercio local
A los inconvenientes que subrayábamos antes, ahora hay que sumarte la medida estrella de Yolanda Díaz. La Federación de empresas de La Rioja, la FER, ha expresado su preocupación después de la aprobación del anteproyecto de ley para la rebaja de la jornada laboral hasta las 37,5 horas. La entidad advierte de sus efectos negativos en el sector.
Consideran incomprensible aplicar esta reducción en un sector con una normativa que permite la apertura de comercios hasta 90 horas semanales. Además, alertan de que esta medida representaría una subida salarial encubierta del 6,25%, al pagar lo mismo por menos horas trabajadas, y obligaría a contratar más personal para cubrir las horas restantes.
la preocupación de los comerciantes
Los propios comerciantes de La Rioja están muy preocupados con esta medida. Daniel es propietario de dos tiendas en Logroño, tiene seis empleados en total, y ya ha pedido consejo a expertos para saber que debe hacer en caso de que se apruebe. No entiende que se trate de la misma forma a las pequeñas empresas que a las multinacionales.
Por su parte, Elena cuenta con una tienda más grande. Tiene 20 empleados, pero se pone en la piel de Dani y de los comercios que cuentan con menos recursos. Además, se centra en la competitividad, de como va a afectar el hecho de que cada día tengas media hora menos para vender.
«Va a afectar mucho a la competitividad con respecto a horarios de centros comerciales, por ejemplo. Una empresa, un comercio que tenga dos o tres personas, va a hacer que cierre media antes por la mañana o por la tarde. Me parece una medida muy drástica», asegura Elena.