«Es mi novela con más carga personal porque he creado un personaje que se parece a mí, pero no soy yo. Soy yo en todo lo que escribo, pero me he inventado todo», avanza jugando al despiste Mariano Sánchez Soler sobre su última obra, El leñador (Alrevés, 2025), que describe como una novela negra de autoficción, «con un protagonista parecido a mí, que vive en el mismo sitio que yo, que ha sido periodista de sucesos durante veinte años y, en la jubilación, escribe novelas policiacas».
Este periodista de sucesos jubilado de pasado glorioso, que en la ficción responde al nombre Carlos Albert, recibe el encargo de escribir un artículo periodístico sobre un crimen cometido años atrás, al tiempo que debe finalizar la séptima entrega de una serie policiaca que tiene entre manos y que protagoniza el inspector-jefe José Pulido. Albert hace balance de su vida e investiga por su cuenta el crimen de Raspai, un suceso de sangre derramada y negocios familiares, mientras en su novela Pulido se enfrenta a su peor caso: el asesinato, a golpes de hacha, del alcalde de una pequeña localidad mediterránea.
Realidad y ficción se entremezclan constantemente en esta trama de espejos que el lector afronta a lo largo de 218 páginas. «Podía haber hecho una novela de quinientas páginas insoportable, pero si no eres capaz de escribir en doscientas la esencia de lo que quieres decir, me parece que no eres un buen escritor«, indica Sánchez Soler (Alicante, 1954), con más de sesenta libros a sus espaldas entre novelas, ensayos periodísticos e históricos o poemarios; estudioso del Franquismo y la Transición y profesor de guion cinematográfico y narrativa en la Universidad de Alicante.
Mariano Sánchez Soler publica «El leñador» / Jose Navarro
El leñador está ambientada entre Alicante y Benidorm, con lugares y personajes ficticios y otros verdaderos, y en ella se habla de corrupción, de abuso de poder, también hay una historia de amor y un crimen basado en un suceso real ocurrido en 2007, que el autor prefiere no nombrar para el lector indague, fácilmente reconocible, «uno de esos crímenes sin solución, el asesinato de un alcalde de un pueblo del interior de la Marina, que fue un desastre desde el punto de vista de la investigación judicial y policial», apunta. A diferencia de lo que ocurre en el caso real, «donde este crimen quedó impune, en las novelas siempre se acaba descubriendo a los malos; yo quería dar respuesta a eso y en la novela el caso no queda impune».
Reflexión sobre el periodismo y la novela negra
En esta obra Sánchez Soler reflexiona sobre el periodismo de investigación que vivió él mismo en durante la Transición en Madrid -«hoy los intrusos con pseudoperiódicos han invadido el mercado y se han metido en política, pero los periodistas hemos estado surfeando para evitar que nos ahoguen siempre», dice- y también critica «sin acritud» el auge de una novela negra llena de «sagas y trilogías», pero asegura que el lector va a disfrutar con «la acidez y el humor bastante negro que tengo» en esta obra, donde «yo no me salvo tampoco, ni me pongo medallas».
Asegura que El leñador es «un relato sentimental, por encima de todo, de amor a esta tierra aunque el fondo del asunto sea un crimen y un caso de corrupción» y confiesa que empezó la escritura de este libro tras desechar la idea de escribir sus memorias «porque en treinta páginas solo llegué a cuando tenía siete años», así que decidió aprovechar lo vivido «y poner la esencia de lo que soy en una novela».
Presentación en Alicante
Mariano Sánchez Soler presentará El leñador el próximo 28 de febrero, a las 19 horas, en la librería 80 Mundos de Alicante, acompañado de la escritora Esther Abellán.