La Guardia Civil ha desarticulado, en el marco de la operación “BOP”, un violento grupo criminal que asaltaba viviendas de lujo en diversos puntos de la geografía española y al que se le atribuyen al menos 16 robos y la sustracción de efectos por valor de al menos 10 millones de euros.
La actividad de este grupo criminal se caracterizaba por el alto nivel de violencia, dado que los asaltantes maniataban a los moradores y los llegaban a amenazar con armas de fuego y por su gran especialización para ocultar su actividad y burlar las medidas de seguridad.