Los accidentes laborales son más comunes de lo que muchos piensan, pero lo que realmente preocupa a los trabajadores es la respuesta de las mutuas de accidentes de trabajo. Un abogado laboralista experto en la materia asegura que ha perdido la cuenta de los casos en los que las mutuas han negado el reconocimiento de un accidente laboral, obligando a los empleados a buscar otras vías para obtener una baja médica y las compensaciones que les corresponden.
El problema radica en que muchas mutuas tienden a minimizar los accidentes o a atribuirlos a causas ajenas al trabajo. Por ejemplo, si un trabajador está descargando un tablón y sufre un fuerte dolor en la espalda, lo lógico sería que la mutua reconociera la lesión como accidente laboral. Sin embargo, en muchas ocasiones, la mutua concluye que el dolor es consecuencia de una dolencia preexistente o de otra actividad ajena al trabajo, denegando así la cobertura como accidente laboral. En estos casos, los empleados terminan acudiendo a la Seguridad Social, donde se les concede la baja, pero por enfermedad común en lugar de accidente laboral.
Los empleados faltan al trabajo casi un día al mes por baja médica, el doble que hace 10 años. / Pexels
Diferencia entre enfermedad común y accidente laboral
Es fundamental entender que una baja por accidente laboral y una baja por enfermedad común no son lo mismo ni en términos económicos ni legales. En primer lugar, en caso de accidente laboral, la prestación económica es mayor: se cobra el 75% de la base reguladora desde el primer día, y en muchos convenios colectivos se paga incluso el 100% del salario. En cambio, en una baja por enfermedad común, solo se cobra un 60% a partir del cuarto día y un 75% a partir del día 21, lo que supone una pérdida económica significativa para el trabajador.
Además, cuando una lesión es considerada accidente laboral, la empresa puede ser responsable si se demuestra que no cumplió con la normativa de prevención de riesgos laborales. Esto abre la puerta a posibles indemnizaciones por daños y perjuicios, recargos en las prestaciones o incluso sanciones para la empresa. Sin embargo, si el accidente no se reconoce como laboral, el trabajador pierde la oportunidad de reclamar estos derechos.
Cómo solicitar un cambio de contingencia
Cuando una mutua rechaza el reconocimiento de un accidente laboral, el trabajador no debe conformarse con una baja por enfermedad común. En estos casos, es fundamental solicitar un cambio de contingencia, un proceso que permite reclamar que la dolencia sea reconocida como accidente de trabajo en lugar de enfermedad común.
Para ello, el trabajador debe solicitar el informe de la mutua en el que se detalla por qué han rechazado el caso como accidente laboral, acudir a su médico de cabecera y explicar la situación, solicitando la baja por enfermedad común y por último iniciar un procedimiento de determinación de contingencia ante el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS). Para ello, se debe presentar una solicitud junto con la documentación médica y cualquier prueba que demuestre que la lesión se produjo en el trabajo.
El INSS evaluará la situación y podrá dictaminar que la lesión, en efecto, debe considerarse accidente laboral, con lo que el trabajador podrá beneficiarse de una mayor prestación económica y de los derechos adicionales asociados a esta contingencia.
Las mutuas y su conflicto de intereses
Uno de los grandes problemas en la gestión de los accidentes laborales es que las mutuas están financiadas en gran parte por las propias empresas, lo que genera un claro conflicto de intereses. Al reconocer menos accidentes laborales, las mutuas ayudan a las empresas a reducir sus costes en cotizaciones a la Seguridad Social y en posibles indemnizaciones.
Esto explica por qué, en muchos casos, las mutuas buscan argumentos para descartar la relación entre el trabajo y la lesión sufrida por el trabajador. Alegan problemas previos de salud, culpan a otros factores o minimizan la gravedad de las lesiones, lo que obliga a los trabajadores a emprender procesos burocráticos y legales para conseguir el reconocimiento de su derecho.
Qué hacer si la mutua te niega el accidente laboral
Si te encuentras en una situación en la que la mutua se niega a reconocer un accidente de trabajo, sigue estos pasos:
- Solicita un informe detallado a la mutua explicando los motivos del rechazo.
- Acude a tu médico de cabecera para obtener una baja por enfermedad común y deja constancia de que la lesión ocurrió en el trabajo.
- Inicia un procedimiento de determinación de contingencias ante el INSS para reclamar el reconocimiento de la baja como accidente laboral.
- Consulta con un abogado laboralista para evaluar las opciones de demanda contra la empresa en caso de negligencia en prevención de riesgos.
- Recoge pruebas (testigos, informes médicos, partes de accidente) que respalden que la lesión ocurrió en el trabajo.